"Vuelvo porque el Xerez debe ponerse en marcha"

Joaquín Bilbao, tal y como avanzó AS ayer, será el presidente del Xerez una vez que se celebre la reunión del Consejo de Administración. Rafael Mateos será el vicepresidente y Antonio Millán el secretario. Gabriel Selma, Fransisco Javier López, uno de los hombres de Morales, y los representantes de Luz Costa Inmuebles y Moralfinsa (otra empresa de Joaquín Morales) serán los los consejeros. Así lo aprobó ayer la Junta General de accionistas, que igualmene aprobó un superávit de 4.529.331 euros y supo, en la voz del administrador concursal, Antonio del Puerto que la sociedad, en concurso de acreedores, "tiene posibilidades ciertas de seguir si llega el convenio". Eso a pesar de que la auditoría continúa reflejando que el patrimonio neto de la entidad azulina es "negativo".

Joaquín Bilbao explicó sus sensaciones en el primer día: "Vuelvo porque el Xerez se encuentra en una situación atípica, sin representatividad, sin consejero. Esta es una cuestión que se tiene que regularizar porque hay actas y asuntos que tienen al club paralizado y tiene que ponerse en funcionamiento". Se ha llegado a especular que la falta de Consejo ha impedido la firma de las escrituras para que la capitalización de la deuda de Morales fuese una realidad

De todas maneras, el Consejo tiene revocadas sus funciones por la jueza de momento y sólo tendría carácter de representación. "Eso fue porque se dieron unas circunstancias concretas. Cuando estas desaparezcan todo volverá a la normalidad, los administradores en sus funciones y cada uno en las suyas".

Accionariado

. Joaquín Bilbao tiene un deseo: "El Consejo debe ser de transición. El Xerez debe terminar en manos de jerezanos. La intención de Joaquín Morales a corto o medio plazo de desprenderse de las acciones que posee. Mateos viene trabajando en que los títulos del Xerez pasen a manos de jerezanos y lo vamos a intentar". Otra cosa es que lo consigan.