El Atleti ensaya para al derbi

Echale huevos, el jueves, échale huevos". El partido estaba sentenciado y los treinta mil atléticos que se acercaron ayer lunes al Calderón recordaron machaconamente a sus jugadores que el partido del jueves ante el Madrid es para ellos el más importante de la temporada, que no les van a tolerar que no se dejen la piel ante el Real Madrid.

Los rojiblancos se contagiaron y Reyes hizo el 3-0 culminando una victoria demasiado abultada para los méritos del Mallorca, que se topó siempre con un De Gea que recupera su nivel. El Atlético ensayó para el derbi y afinó la puntería que va a necesitar. Y venció al Mallorca con su pegada y sin el Kun.

Cambio de sistema.

Quique sorprendió a todos dando entrada a Elías en el once titular. Para que jugase el brasileño, modificó el sistema y en ese cambio salió perjudicado el otro refuerzo, Juanfran, porque prefirió que Reyes jugase en la derecha, a banda cambiada, donde más rinde el sevillano indudablemente. Era difícil distinguir a Assunçao de Elías físicamente. Parecían el mismo jugador y se les distinguía por las botas. A los cinco minutos se escucharon pitos en el Vicente Calderón por el juego del Atlético. No había hecho nada especial el Mallorca, salvo un disparo arriba de Víctor, pero manejaba la pelota y eso desesperó a los parroquianos colchoneros.

De Gea había parado un disparo de Webó, cuando en el primer córner y primera ocasión del Atlético, Reyes sacó al primer palo y Valera cabeceó a la red. Los de Quique se ponían por delante en el marcador y debían demostrar que eran capaces de manejar la ventaja. No llegaron a imponerse con rotundidad, pero hubo minutos en los que tocaron con más pausa de la habitual y Elías se distinguió de Assunçao con un potente disparo desde la frontal entre los tres palos que despejó con dificultades Aouate.

El Mallorca no se entregó y llegó dos veces con claridad antes de que el Atlético hiciera su segundo gol. Nsue cabeceó un centro desde la izquierda de Kevin y Pereira disparó con potencia cruzado probando la atención y los reflejos de De Gea.

El Chori Castro había entrado por Víctor, lesionado, y le dio aún más movilidad al ataque del Mallorca. Entonces, Mérida tuvo fe en la presión, se la quitó a Rubén y se la dio en profundidad a Forlán para que el uruguayo, en ventaja, ajusticiara a Aouate.

El partido llegaba de cara al Atlético tras el descanso y se trataba de rematarlo al contragolpe. El Mallorca salió a imponer su fútbol combinativo y la tocó mucho y bien. El Atlético tuvo una ocasión clara con un potente zurdazo de Reyes que desvió a córner Aouate. De Gea le había sacado una buena mano a De Guzman. El portero rojiblanco estaba empeñado en no dejar escapar la victoria y lo demostró parando con autoridad a Webó el lanzamiento del penalti que había cometido Antonio López, que le costó la expulsión al capitán atlético.

El Mallorca jugó unos minutos en superioridad. Hasta que De Guzman, con su expulsión, igualó fuerzas. Laudrup sacó a Cavenaghi por Rubén, pero su ofensiva trabajada en la elaboración siguió siendo tan estéril como antes de la expulsión. El Atlético ganó, volvió a estar serio en defensa, y mostró que también tiene pegada sin el Kun. Reyes redondeó el resultado marcando el tercero. Y el árbitro pitó el final.