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El reportaje | La crisis se ensaña con el fútbol andaluz

El dilema del fútbol andaluz: a manos extranjeras o al juzgado

Málaga, Granada y Córdoba han sido vendidos; Xerez, Betis, Cádiz y Recre, intervenidos

<b>UN PATRIMONIO DE 16.600 MILLONES.</b> A sus 43 años, el patrimonio de Al-Thani asciende a 16.600 millones de euros. Tiene 160 pura sangres, estudió Gestión Económica en Egipto y dirige un conglomerado empresarial con 3.000 empleados. Es primo del Emir de Qatar y tiene casa en la Costa del Sol.

Si esta tarde no cambia sustancialmente la situación, este fin de semana la plantilla del Polideportivo Ejido no viajará para jugar su partido frente al Lorca, en protesta por las mensualidades que se le adeudan a sus futbolistas. La situación es tan extrema que el año pasado desapareció su filial y ahora puede hacerlo el club.

Lamentablemente no es un caso aislado en el fútbol, y mucho menos en el andaluz. La Unión Deportiva Estepona levantó ayer su amenaza de huelga, y de no jugar en Jumilla. A los jugadores se les deben 200.000 euros, y aunque ayer cobraron una mensualidad, todavía se les deben dos. El problema no está solucionado. Dos casos límites que tienen su reflejo en los clubes señeros de la región. Así, Cádiz, Recreativo y Xerez se encuentran inmersos en concursos de acreedores para salvar su problemática situación económica. En Jerez los administradores concursales estuvieron meses buscando un coche que Gorosito y sus ayudantes no devolvieron. Y en el Cádiz, que celebra en estos meses su centenario, han llegado a concentrar a los jugadores después de comer para que vengan almorzados y ahorrar ese gasto.

Ante estas situaciones surrealistas, algunos, como el Málaga, buscaron inversores extranjeros. Fernando Sanz, tras obrar un milagro económico y deportivo, vendió el club a Abdullah Bin Nasser Al-Thani. El jeque pagó 36 millones por el club y fichó jugadores anónimos (Rondón, Galatto, Quincy, Malagueño...) que levantaron suspicacias en la parroquia malaguista. Sin embargo, ahora tienen a Pellegrini en el banquillo y a Baptista, Demichelis y Asenjo en su once. A Granada llegaron inversores italianos, la familia Pozzo, con once fichajes bajo el brazo. Y hasta el Córdoba negocia con otro transalpino, Gaucci. Compradores a la baja que aprietan conscientes de las exigentes deudas que heredan.

En los extremos aparecen los equipos hispalenses. El Sevilla, que parece haber perdido el tino con los fichajes, mantiene una desahogada situación económica. Mientras el Betis parece la Rue del Percebe. Intervenido judicialmente, acuciado económicamente por los manejos de Lopera, presidido por un mito como Gordillo y pretendido por un tipo declarado persona non grata en el Xerez, Luis Oliver. Su situación es extrema, pero su enorme masa social garantiza su existencia. No como la del Estepona, que hasta llamó al jeque Al-Thani. A situaciones desesperadas...

La región más representada

Andalucía, con ocho equipos (Sevilla, Málaga, Almería, Betis, Xerez, Granada, Córdoba y Recre) es la región más representada en la Primera y Segunda División del fútbol español. Es cierto que Levante tiene un equipo más en Primera (Villarreal, Valencia, Hércules y Levante), pero en la categoría de plata sólo tiene dos (Villarreal y Elche). Madrid (Real Madrid, Getafe, Atlético, Rayo y Alcorcón) y Cataluña (Barcelona, Espanyol, Barcelona B, Girona y Nástic) suman cinco. También aparecen representadas regiones como Castilla-León (4), País Vasco (2), Galicia (2), Murcia (2), Aragón (2), Canarias (2), Baleares (1), Navarra (1), Asturias (1) y Castilla La Mancha (1).