Simao
"Vestir esta camiseta me hizo mejor persona"
El portugués se despidió de la afición con una muestra más de su elegancia. Con lágrimas en los ojos escuchó las palabras de Cerezo, su gran valedor en el club, e incluso hasta en tres ocasiones se mordió la lengua cuando fue preguntado por qué el Atlético no ha impedido su marcha.
Lo primero que quiero es dar las gracias a todos, al club por haber confiado en mí hace cuatro años y haber pagado tanto dinero al Benfica para ficharme. Creo que no he defraudado a nadie. He sido siempre un profesional y siempre he tenido buena amistad con todos. En este momento me cuesta y me duele mucho salir, porque es el grupo donde he tenido más amigos, desde el jardinero al último jugador. Llegó el momento de dejar esta gran familia, de dejar de vestir esta camiseta, que me hizo más jugador, mejor persona y mejor profesional. Cuando llegué dije que se podía ganar un título. No hemos ganado uno, sino dos, y muy importantes, nunca antes en mi carrera había conseguido algo así. Esto no es un adiós, es un hasta luego, porque seguiré teniendo contacto con todos, seguiré como aficionado apoyando a este gran equipo. Ha sido un honor haber vestido esta camiseta durante tres años y medio y lo voy a echar de menos.
¿Por qué no llegó un entendimiento entre las partes para que usted continuara?
Porque así es el fútbol. Dentro de poco quedaría libre para firmar por quien quiera y sólo puedo dar las gracias al presidente por haberme dado permiso para poder negociar un nuevo contrato, quizá el último de mi carrera de profesional.
¿Cómo le gustaría que le recordara esta afición?
Poca gente me conoce, pero los que han convivido conmigo saben que siempre he tenido una sonrisa y una palabra de cariño. Quiero ser recordado como un jugador ejemplar y profesional.
¿Será difícil de olvidar la despedida que le dieron sus compañeros el miércoles?
Jamás olvidaré ese momento, como todos los momentos mágicos que pasé en este club, los dos títulos que gane y la final de Copa ante el Sevilla, con 40.000 atléticos apoyando después de haber perdido. Son momentos que jamás olvidaré. Quiero dar las gracias por el apoyo a la afición, soy uno más entre ellos apoyando a este equipo. Hoy no pude contener las lágrimas algo que sí pude hacer el miércoles ante la afición. Fue un momento muy emocionante cuando Alberto, el jefe del vestuario, me llamó y me dijo "tienes que salir, la gente lo pide". La afición significa mucho y jamás la olvidaré.
¿Además de la oferta del Besiktas ha tenido otras últimamente? ¿No le ha hecho el Atlético una propuesta para continuar?
Por suerte, siempre, he tenido propuestas. Veo a Futre en mi despedida y me acuerdo cuando intentó ficharme para el Atlético en el año 2000. Vino a mi casa a intentar convencerme y me alegro de que siete años después pudiera cumplir su sueño, que también ha sido el mío.
¿Qué le ha enseñado el Atlético?
He aprendido que cuando estamos todos juntos, con el mismo pensamiento, somos más fuertes y todo es mucho más fácil. Cuando ganamos los dos títulos pasó eso. El Atlético es un gran club, con una historia impresionante y un presente importante. Hay que seguir así, trabajando en la misma línea.