El Salamanca se quedó helado contra el Celta

El frío nunca debe servir de excusa. Y mucho menos para el Salamanca, más acostumbrado que los vigueses a las bajas temperaturas. Sin embargo, los charros dieron la sensación de salir helados ayer al terreno de juego. El Celta les superó en todo momento durante la primera parte y sólo la mala fortuna impidió que el conjunto de Paco Herrera llegara con una mayor ventaja al descanso. David no estuvo afortunado de cara a gol, pero su participación fue clave. El ex delantero del Salamanca asistió de forma genial a Trashorras y el lucense se encargó del resto. No tuvo ninguna dificultad para ganarle la partida a un torpe Goikoetxea y definió solo ante Ribas.

El partido estaba cuesta arriba para el conjunto de Óscar Cano, pero la expulsión de Murillo, quizá algo rigurosa, les metió en el partido. Herrera ordenó a sus hombres que se metieran atrás y la entrada de Juanjo dio un nuevo aire al ataque salmantino. El delantero tuvo la oportunidad de igualar el encuentro en un genial remate con la espuela, pero Catalá evitó el tanto sobre la misma línea de gol.

El tanto charro parecía cuestión de tiempo, pero entonces volvió a aparecer el triste protagonista del partido. Piñeiro Crespo expulsó injustamente a Héctor Yuste, quizá para compensar, y el Celta dejó de sufrir. Los errores del colegiado asturiano fueron de bulto y perjudicó a ambos bandos. Los unionistas reclamaron un penalti por manos de un defensor vigués, pero el caso es que el Salamanca no hizo méritos para puntuar ayer en Vigo.

Herrera

Fue el primer partido en el que jugamos a defender el resultado. Fue una gran victoria. Respecto al árbitro, si no hubiera expulsiones, no habría pasado nada. A estas alturas, el objetivo sigue siendo acabar en playoff".

Cano

Hubo un penalti tan clamoroso que Balaídos se quedó parado, porque todo el mundo pensaba que lo iba a pitar. Jugando once contra once, ellos fueron superiores. Nuestra actitud fue buena".