NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

Liga Adelante | Xerez 3 - Girona 1

Festín Moreno en su '400'

El Girona no mereció el castigo. El Xerez, con 27 puntos.

Álvaro Rivero
Festín Moreno en su '400'

Vicente Moreno es un líder inagotable, que aparece siempre cuando las cosas se ponen complicadas. Lo puede hacer desde el vestuario, donde marca espíritu y alma de equipo. Pero como demostró ayer, su hábitat natural es el césped. Con dos testarazos certeros, consolidaba al Xerez en zona play off tras un partido que siempre pareció que iba a ser para el rival, y se auto endulzó un homenaje sentido por sus 400 partidos de azulino.

El baile del Girona durante toda la primera mitad señaló una vez más el carácter ambiguo de este Xerez, irregular y cambiante. Despotovic, animado por un equipo que tuvo la posesión, puso por delante a los suyos en el marcador después de fusilar al guardameta Chema. Los de Agné, muy superiores, no fueron capaces de imponer su superioridad con goles.

La entrada de Bermejo animó al Xerez tras la espectral imagen inicial. Siempre aparece en los días importantes, como en la jornada del ascenso xerecista a Primera, la cabeza de Vicente Moreno, que abría una vía para alcanzar esa cifra importante de los 27 puntos al resolver a gol un centro de falta de Capi. El Girona reaccionó y volvió a adueñarse del partido. Tuvo dos ocasiones bastante claras, pero se encontró pronto con que otra vez el valenciano del homenaje levantaba los pañuelos de Chapín con otro gran tanto que sacó de quicio a Agné. Para rematar la victoria, Capi endulzó su discutido partido con un gran gol tras una buena jugada entre Font y Pablo Redondo.

Un homenaje premonitorio

Al final, el acto de homenaje al valenciano Vicente Moreno no se redujo solo a una placa del club y a otro obsequio entregado por la Fundación del Xerez, representativa de la afición azulina. Ayer, los 7.374 espectadores que se dieron cita en Chapín vieron también como el equipo arropaba a su eterno 'capitán', aunque no lo sea ahora oficialmente, haciéndole entrega de una camiseta con el número 400 a su espalda.