Europa League | Brujas 1 - Villarreal 2
Rossi amarra el liderato
Hizo dos goles para remontar el tanto inicial del Brujas. Los amarillos se tuvieron que emplear a fondo
No fue su mejor noche y apenas pudo desenfundar el fútbol que le gusta pero el Villarreal logró su doble objetivo de ganar como visitante en esta Europa League y, sobre todo, pasar como primero de grupo a la siguiente fase, primer objetivo de la temporada que se ha logrado comprobando que en Europa nadie regala nada y que esta competición tiene más nivel del que se presumía. El cartel de rivales que espera es significativo, como lo es lo que hubo que sufrir ante un equipo ya eliminado pero que no regaló nada. Eso sí, el Submarino echó mano de su tremenda pegada, el hecho diferencial que le da ventaja sobre la mayoría de sus rivales, y por eso le bastaron cinco minutos de inspiración para que Rossi liquidara con dos goles al Brujas. Pero antes y después le tocó al cuadro amarillo arremangarse y fajarse con empeño para no caer en tierras belgas donde siempre, es historia, le ha tocado sufrir a los españoles.
Necesitó el Submarino que lo rejonearan para meterse en el partido. Su arranque fue frío como la noche y el físico del Brujas le permitió tener la pelota y empezar a carburar antes que los amarillos merced a Ronald Vargas, el mejor de los locales. Una acción iniciada por el venezolano y finalizada por Kouemaha, previo remate al larguero de Perisic, abrió el marcador e hizo planear la sombra de una nueva derrota de visitante para los de Garrido. Pero esta vez no iba a ser así y el Villarreal se repuso al instante con dos hachazos de Rossi. En el primero se suspendió en el aire para empatar de cabeza y dos minutos después se fabricó un 'penaltito' que él mismo transformaría. A los belgas les duró el caramelo de verse por delante tres minutos y al Villarreal se le borró la caraja inicial y mantuvo el control hasta el descanso marcando el ritmo y aumentando su posesión.
Con suspense. La segunda mitad era de sentencia o problemas y fue lo segundo. Un tercer gol amarillo hubiera cerrado el partido pero como éste no llegaba, de hecho ni siquiera se creaban ocasiones, los locales siguieron martilleando en busca de Diego López para sacarse un empate que merecían. El balón le duraba poco al Villarreal, que nunca se sintió a gusto, y Garrido buscó en Borja Valero algo distinto con lo que atar una victoria que no se terminaba de certificar peligrosamente. Pero tampoco este revulsivo dio efecto y no se elaboraron las contras deseadas para aprovechar los espacios que iba dejando el Brujas en su ansía ofensiva. La igualada estuvo más cerca que el tercer tanto español e incluso el colegiado, un amigo toda la noche, anuló un gol dudoso al Brujas que habría echado al traste todo.
En la recta final tocaba ver la capacidad de aguante del Villarreal, algo de lo que tendrá que echar mano en las siguientes eliminatorias a vida o muerte, y ahí el trabajo defensivo amarillo sí que se impuso pues los belgas ya no encontrarían un resquicio por el que colarse en busca del empate. La veteranía de Senna, la pelea de Gonzalo con Kouemaha y el empeño de todos por quedarse con un triunfo clave sirvió para lograr todos los objetivos. El Villarreal ya sabe ganar fuera y avanza con paso firme en una Europa League de la que ya es uno de los favoritos.