El futuro de Llorente sigue estando en Bilbao

El futuro deportivo del Athletic depende de la continuidad de Fernando Llorente, que no tiene sustituto ni en Lezama ni en el mercado. El Real Madrid sabe que es un tema espinoso para Fernando García Macua, con el que está enfrentado por otro asunto importante, como es el de la negociación televisiva, en el que Ibaigane ha sido menospreciado. De ahí que en la comida de clubes imperase el silencio sobre Llorente. Sólo sonó algún que otro elogio hacia el internacional en el palco tras su gran primera parte. Nada más. Pese a ello, el silencio puede tener la lectura de que la operación está en marcha en la cabeza de Florentino Pérez y para qué hablar cuando ya sabe que el Athletic no vende.

"Tienen a Higuaín, Benzema Si no les parece bastante, que vayan a por Lukaku o Rooney, que el Athletic necesita a Llorente bastante más que el Madrid". El comentario de uno de las personas más influyentes en el club refleja a la perfección el sentir rojiblanco en el caso Llorente. No se ha cumplido un tercio liguero y parece el mercado de verano. El Madrid va como un tiro en lo deportivo, pero Mourinho sabe que para terminar con la tiranía del Barcelona necesita a lo mejor. Y Llorente dejó claro sobre el verde que es una realidad apabullante. Quizás cara, pero apabullante.

Se suele decir que benditos los problemas que tiene un equipo cuando tiene futbolistas muy cotizados, pero Macua está metido en un laberinto. Así que la idea es dejar pasar un poco esta fiebre por Llorente para dar un golpe en la mesa con un intento de ampliación de contrato. Lo lógico, además, es que se mueva en plan interesado, poco antes de las elecciones. Renovarle le aseguraría la reelección. O casi.

Si el de Rincón de Soto no acepta, el problema seguiría ahí. El Athletic no vendería y exigiría al futbolista que pusiese los 36 millones, con IRPF y lo que haga falta. Aunque sabedor de que nunca ingresaría más allá de esa cantidad, hay quien piensa que, con caducidad de contrato en el 2013, la única solución para todos es que el Madrid ofrezca más dinero, se evitase el IRPF, y el Athletic sacase mayor tajada para poder explicárselo a los socios.

Y es que por no tener, no tiene ni a Aduriz. Un fallo de planificación grave que, como se marche Llorente, pasará al calificativo de muy grave. Se plantea, incluso, que la única solución sería comprar al guipuzcoano por un precio razonable. Su tercera etapa en Bilbao levantaría ampollas, pero sería la única salida. Nadie ve en casa un nueve que se acerque lo mínimo. Y en el mercado sólo aparece con interrogantes otro ex de Lezama, el realista Imanol Agirretxe, un diamante sin pulir que no garantiza salir de este entuerto