El Salamanca gana al 'Alba' en un partido anodino

El Salamanca ha logrado su primer triunfo en los dos últimos meses en su propio campo al ganar al Albacete (1-0) en un partido insulso y sin intensidad, con dos equipos que no han dominado con claridad. Ha sido un encuentro blando y anodino, con oportunidades escasas por parte de los dos equipos y con una falta de juego en el centro del campo, ya que ninguno de ellos supo dominar el balón.

La primera parte del partido fue aburrida, sin grandes oportunidades, con un Albacete bien situado en el centro del campo y con un conjunto local, el Salamanca, que quería tener el control del juego, pero que apenas llevaba peligro al área contraria. El lateral izquierdo Arbilla se convertía en uno de los jugadores más destacados de esta primera parte, por su velocidad al subir al ataque y por su seriedad en la defensa.

Enfrente estaba un Albacete que había tejido una gran tela de araña en el medio del campo, con dos jugadores como Verza y Alan Baró que hicieron un trabajo serio y contundente, y que, poco a poco, iba adelantando la línea defensiva. A la media hora de juego, el Salamanca sucumbía ante el avance del Albacete, que llegaba con claridad al área contraria pero sin oportunidades definidas, y con un medio del campo salmantino que se había desorientado.

Sin embargo, en el minuto 37 Perico lleva un contraataque, con silbidos por parte de la afición del Salamanca, abre a la izquierda para Sarmiento que mete el balón en el área y remata a gol Perico, dedicando este primer tanto a Miguel García, que estaba sentado en el palco del estadio Helmántico. La segunda parte comenzó con un Albacete que quería llegar con rapidez al área del Salamanca, pero ni Tato ni Asen lograban acercarse con peligro.

Las dos oportunidades más claras en estos segundos 45 minutos fueron del Salamanca, en dos remates de Héctor Yuste (minuto 46) y de Marcos Márquez (minuto 48), a sendas faltas. Pero ahí se acabaron las ocasiones de gol, ya que ni el Salamanca ni el Albacete llegaban al área contraria con peligro.

Tan sólo jugaban en el centro del campo, con un dominio por parte del Salamanca, pero sin intensidad, y con un Albacete que quería llegar a la portería salmantina, pero ni podía ni sabía desbordar la defensa contraria. La segunda parte sirvió para ver jugar a Galindo, el jugador cedido por el Arsenal, que debutó en el estadio Helmántico y al que ya se le vieron detalles de calidad.