En busca de los octavos

El FC Barcelona espera sellar esta noche en el Parken de Copenhague su pase matemático a los octavos de final de la Champions League. En el caso de conseguir la victoria, los de Guardiola tendrían asegurada, cuanto menos, la segunda plaza de su grupo a falta de dos jornadas. Y ese dato, teniendo en cuenta que la próxima jornada de Champions se disputará la misma semana (o no, vaya usted a saber) que el Barça-Madrid, es un dato a tener muy en cuenta.

No obstante, no se adivina fácil el compromiso a pesar de la evidente diferencia que hay entre ambas plantillas. Los daneses son más duros de lo que aparentan, sobre todo en su casa, y el Barça, en los partidos europeos que disputa como visitante no lleva una gran racha que digamos.

Los números están ahí para demostrarlo. De sus diez últimos partidos disputados en Champions como local, el Copenhague ha logrado 9 victorias. Inauguró la serie de estos años de gloria derrotando al Manchester United de Rooney y Cristiano Ronaldo. Además, el equipo de Solbakken es el líder imbatido de la Liga danesa.

En contraposición, el poderoso Barça de Pep Guardiola sólo ha ganado uno de sus últimos diez partidos como visitante en el máximo torneo europeo. Fue en el campo del Dinamo de Kiev. El resto fueron ocho empates y una derrota, ante el Inter de Mourinho en la semifinal de la última edición de la Champions.

El partido se prevé duro. Los daneses basan su juego en un estilo directo y en intimidar a sus rivales en el cuerpo a cuerpo.

Pocos cambios realizará Guardiola respecto al once que goleó al Sevilla. Xavi apunta a mantenerse en el equipo titular después de las buenas sensaciones con las que acabó el partido liguero. En cambio, le podría llegar el turno de descanso a Busquets y a Iniesta. En ese caso, Mascherano y Keita serían los encargados de sustituirles y aportar músculo al centro del campo blaugrana.