La Ley Concursal podría beneficiar mucho a Lopera

Los jugadores tendrán un trato privilegiado con la Ley Concursal", afimaba ayer, horas después de que el Betis confirmara que se ha acogido al Concurso Ordinario, ese gran experto en derecho mercantil y gran bético llamado Luis Olivencia. Aunque la Asociación de Futbolistas Españoles tema que con estas circunstancias el equipo verdiblanco pretenda retrasar e incluso recortar la deuda que tiene contraída con futbolistas de otras temporadas, lo cierto es que los trabajadores de una empresa son los más beneficiados en cualquier Ley Concursal. "Estarán más protegidos", afirma Olivencia.

"Pero la empresa tiene que llegar a un convenio con los acreedores o liquidarse", continúa el abogado. Entre esos grandes acreedores se encontrarían Hacienda, algunos futbolistas que siguen y muchos otros que se fueron de la entidad y, seguramente... El ex máximo accionista, Manuel Ruiz de Lopera.

Una vez que salió del club, al menos de facto (las acciones de FARUSA, vendidas bajo contrato a Oliver, se encuentran embargadas y administradas judicialmente), el empresario de El Fontanal ya no figura como gestor del Betis, sino, posiblemente, como acreedor. En el informe que se maneja se asegura que varias de las empresas de Lopera (como Encadesa o FARUSA) cobraban al Betis por conceptos tan variopintos como el almacenaje de material deportivo.

El hecho es que el entramado de sociedades relacionadas con el Betis no ha sido todavía desenredado ni por las auditorías ni por los peritos judiciales, que acabaron de declarar ayer por el periodo 92-98, pero que siguen investigando toda la década siguiente, desde 1998 a 2008. Podría ser interminable.

20 horas ante la jueza Alaya

Veinte horas de comparecencia y más de 100 preguntas de los cuatro abogados de Lopera ha tenido que soportar la jueza Mercedes Alaya en estos dos días de declaración de los peritos judiciales por el presunto delito societario (92-98, queda otro informe del 98 al 2008) del ex máximo accionista del Betis. Los letrados Montero-Aramburu, así como Alfredo Flores y José María Calero torpedearon a los peritos pero éstos se han mantenido firmemente en la postura inicial que llevaban a la comparecencia, que Lopera habría dañado al Betis en 12,9 millones de euros.