Portugal reconoce que no subirán los dos laterales

El entrenador del Racing reconoció ayer en rueda de prensa la noticia, adelantada por AS, de que el equipo va a introducir su primera modificación significativa en el arriesgado estilo de juego abrazado por el Racing esta temporada: los dos laterales no volverán a subir simultáneamente al ataque y uno de ellos deberá colaborar en cada acción con los centrales a la hora de bascular y cerrar defensivamente el camino a su portería.

Miguel Ángel Portugal matizó que no se trata de ninguna renuncia: "Es cierto que hasta ahora subíamos por los dos carriles a la vez y lo que estamos ensayando es que, sin renunciar a la profundidad de nuestros laterales, ahora se van a a alternar. Se trata de seguir jugando de la misma manera pero con las espaldas cubiertas, sobre todo ante un equipo tan rápido como el Almería".

Villarreal.

El burgalés también reconoció que el segundo gol del Villarreal ha sido el detonante que le ha llevado a tomar esta decisión: "A veces los goles son un punto de inflexión. El Villarreal nos había estudiado, sabía que a la espalda de nuestros laterales podía haber huecos y con una jugada muy sencilla tras una pérdida de balón nuestra nos metió un gol fácil que nos supuso un bofetón muy grande".

Portugal toma esta decisión justo ante un partido en el que no cree que se juegue el puesto: "Sólo me juego dos puntos muy importantes para el Racing".

Duda entre alinear uno o dos delanteros

Al técnico verdiblanco el cuerpo le pide juntar en el equipo inicial a Ariel Nahuelpan y a Markus Rosenberg. Pero no lo tiene claro. Los antecedentes le hacen dudar: "Jugamos en casa y a mí me gusta poner a dos delanteros, pero la verdad es que los mejores partidos que hemos hecho este año han sido en los que hemos tenido un hombre entre líneas apoyando al punta. No sé todavía lo que voy a hacer el domingo". Frente al Getafe se inclinó por poner al argentino y al sueco a la vez y la verdad es que hasta que en los últimos minutos el equipo empezó a jugar más directo hacia el área, el juego ofensivo no fue nada fluido. Quedó una gran zona libre de jugadores racinguistas entre los dos delanteros y los dos pivotes que aprovechó muy cómodamente el equipo de Míchel con Boateng, Parejo y Víctor.