El Castellón se ahoga en sus errores defensivos

La película de ayer ya se ha proyectado más de una vez esta temporada. El Castellón juega medianamente bien, se pone con ventaja en el marcador y al final sus errores estropean la función. El Sporting Mahonés se le subió a las barbas al equipo de Jordi Vinyals en el segundo tiempo. Volvió a cometer esos errores imperdonables que le costaron muy caro. Tan caro que regresó de Menorca con una mano delante y otra detrás, es decir, con una nueva derrota. Y eso que todo apuntaba a que el conjunto de la capital de La Plana iba a sumar la segunda victoria consecutiva. Nada de eso. Los errores colectivos le siguen costando muy caro a los 'orelluts'. Acabaron claudicando ante un rival correoso que puso todo lo que hay que poner en el terreno de juego. Así que a reflexionar y a empezar a escribir la carta a los Reyes Magos, aunque estos estén muy lejos aún.

De todo tuvo la primera parte. Una salida explosiva de los castellonenses con tres claras ocasiones de gol en apenas siete minutos (dos de Lolo y una de Fernando Béjar), una tremenda tromba de agua al cuarto de hora, un viento huracanado, la reacción de los locales que avisaron a la media hora de juego y, afortunadamente, la reacción albinegra que en el minuto 37 encarriló el marcador. Fue cesar la lluvia y esclarecérsele las ideas al Castellón que perdió el oremus durante unos instantes (Iray Barreto y Raúl Vates, lo probaron). El pase de David Lázaro le llegó a trancas y barrancas a Lolo que tras la salida en falso de Moso envió mansamente al fondo de la portería mahonés. Así que con ventaja castellonense se llegó al intermedio.

No hubo cambios tras la reanudación. El Castellón tenía controlado el partido hasta que en un grave despiste colectivo el cuero le llegó a Pedro García y éste superó a Rangel. Era lo peor lo que le podía suceder al Castellón. El gol envalentonó al Sporting Mahonés, que siete minutos después volteó el marcador con un testarazo del central Jeroni a la salida de un cambio. Luego, con el 2-1, llegaron las prisas y los cambios. El tercero planeó varias veces sobre la portería albinegra. Luismi Loro quemó el último cartucho en el 86' con una falta que rechazó el portero Moso.