Saúl
"El equipo no está tan mal como parece"
De la grada al once. Después de dos partidos seguidos fuera de la convocatoria, Saúl disfrutó el jueves de su primera titularidad desde que se incorporó al Deportivo.
¿Tuvo que esperar más de lo que pensaba para jugar su primer partido oficial como titular con el Deportivo?
Por fin ha llegado ese fruto que tanto esperaba, que es el que todos queremos y más contra un gran equipo como el Villarreal. Para ser mi primer partido como titular, estoy contento con lo que hice. La pena es que no nos acompañó el resultado.
Cuando Lotina le dejó fuera de las convocatorias contra el Sevilla y el Getafe, a muchos les pilló por sorpresa esa decisión...
Todo el mundo pensaba que iba a empezar jugando, pero yo sabía que no iba a ser fácil. En el primero de los dos partidos no fue una sorpresa.
¿Por qué?
Uno tiene que ser sincero y reconocer cuando está mejor o peor. En la semana del partido contra el Sevilla no me entrené muy bien y sabía que me podía quedar fuera. El siguiente partido sí que esperaba volver, pero hay que aceptar lo que diga el entrenador. Si te manda a la grada, te toca y ya está.
¿Uno le da muchas vueltas a la cabeza cuando se ve en una situación así?
Es duro ver que te quedas dos semanas fuera de la convocatoria. En el momento te da un bajón, porque quieres ayudar, participar y estar en el equipo, pero igual que me pasó a mí, le está pasando a otros compañeros. Es ley de fútbol. La temporada es larga y va a haber oportunidades. Estoy convencido de que voy a terminar jugando muchos minutos. Nunca tuve ningún miedo en ese sentido, aunque siempre te gusta estar en todas las convocatorias y jugar.
¿En qué nivel de forma se vio contra el Villarreal?
Me sentí bien, sobre todo en defensa, que es lo que más tengo que trabajar y mejorar. En eso estuve bien, ayudando en todo momento y cerrando las líneas de pase.
¿Y en ataque?
También acabé contento, pero más en la segunda parte. En algunos momentos tocamos el balón, pero lejos de la portería y eso no me ayuda. Soy un jugador al que le gusta encarar y centrar, pero no había muchas posibilidades.
¿La ocasión que usted le sirvió en bandeja a Desmarets pudo haber cambiado el desarrollo del encuentro?
Si hubiese entrado, habría cambiado el partido. Fue una pena, porque podía haber sido un factor importante estar por delante en el marcador. Es lo que le falta al equipo. Necesitamos empezar un partido y vernos en ventaja, no estar ahí con el 0-0. Así estaríamos un poco más tranquilos.
Desde fuera, el equipo parece negado cara el gol.
Mirando el número de ocasiones... Algunos días nos ha faltado esa pizca de suerte que se necesita en determinados momentos, pero no hay que pensar demasiado en ese tipo de cosas. Los goles llegarán. Teniendo ocasiones, siempre llegan.
¿La falta de goles es un problema de confianza, de calidad o de suerte?
Si falta algo, puede ser confianza y descaro a la hora de chutar y llegar arriba. Calidad estoy seguro de que no falta. El equipo tiene jugadores que finalizan muy bien, lo vemos todos los días en los entrenamientos. Lo que pasa es que después llegan los partidos y parece que todo se nos pone cuesta arriba.
Con tres puntos y el Bernabéu a la vuelta de la esquina, ¿qué importancia tiene el próximo partido contra el Almería?
Queremos llegar con seis puntos al Santiago Bernabéu, pero no es el momento de ponerse dramáticos. No hay que pensar que tenemos una final contra el Almería y tampoco que estamos en una mala situación, porque la Liga acaba de empezar. Llevamos cuatro partidos y sólo hemos perdido uno. La realidad es que empatamos tres. El equipo no está tan mal como parece, lo que pasa es que los empates no cuentan nada y cualquier equipo que gane un partido y pierda tres tiene los mismos puntos que nosotros. Hay que estar tranquilos y los resultados llegarán. Estoy seguro.