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Liga BBVA | Sevilla 1 - Racing 1

Pinillos abre la caja de los truenos en el Pizjuán

El Sevilla no alcanza el liderato y Palop discute con la grada

Actualizado a
<b>EL PENALTI. </b>Toño arrolla a Alfaro en la jugada que dio origen al penalti que significó el 1-0.
EL PENALTI. Toño arrolla a Alfaro en la jugada que dio origen al penalti que significó el 1-0.morenatti

El Sevilla dejó escapar el liderato en una nueva actuación insoportable. Incapaz de ganar en el Pizjuán, antes inabordable, al Braga, al Depor o al PSG, el Racing se suponía una oportunidad perfecta para recuperar un poco de autoestima y algo de fe en un proyecto en entredicho. Se trataba de ser el líder y enseñarle músculo al resto de la Liga. El Sevilla lo tuvo todo de cara, hasta un gol nada más empezar para disfrutar de una noche cómoda. Pero terminó fracasando y entregado a un Racing mejor. Más equipo, con más confianza en su propuesta y demasiado prudente. Con una pizca más de ambición y algo más de fortuna (dos oportunidades estupendas de Cisma y Diop), hubiese ganado. La foto de Palop encarado con los Biris al final es la imagen de un equipo desquiciado que no es feliz en casa, que se atropella y es consciente de que no creen en el grupo. Jugar en Nervión, que ya pita por sistema a sus jugadores y no se desespera con los resultados sino con el plan, se ha convertido en un infierno para el Sevilla. Un flan.

Y eso que la película empezó bien para el Sevilla. Y con una imagen familiar. Toño arrolló a Alfaro casi como Schumacher se llevó por delante a Battiston, también en el Pizjuán (82). Esta vez el árbitro sí señaló la infracción. Negredo, que mejora por días, hizo líder virtual al Sevilla. Decepcionó el Racing al principio porque venía avalado por su buen partido en Zaragoza y su propuesta ofensiva, pero despistado y algo blando hasta que avanzó el partido. El Sevilla no sentenció en un mano a mano de Perotti, incapaz de resolver un mano a mano con Toño.

El Racing entendió pronto que no había feeling entre el Sevilla y la grada y avanzó metros para crear inquietud. Lo consiguió. El Sevilla fue un fiasco en el medio, con Zokora y Cigarini desaparecidos. Y empezó el runrún en la grada. Pinillos, que jugó anoche porque Portugal quería un anti-Perotti, pasó por el área y se sacó un misil imparable para Palop, que no daba crédito. El resto fue un baile sin ambición del Racing, que casi no quiso ganar. La pesadilla terminó con Palop encarándose con la afición. Una imagen impropia de un campeón hace cuatro meses.

Portugal "Este punto nos da confianza"

"En la primera parte estuvimos peor y en la segunda mejoramos. El empate es positivo por las sensaciones que deja. Este es el estilo que queremos. A pesar de ser un equipo pequeño lo intentamos y estamos satisfechos con ello. El empate nos sabe bien porque las sensaciones son buenas. Todos los jugadores han cumplido perfectamente. Cuando los conceptos los tenemos claros es mejor. El equipo coge confianza y seguiremos así".

Álvarez "No me gusta que nos silben"

"Estoy convencido de que hay jugadores que van a rendir mucho más. El público pita porque no está conforme, pero no quiero que se le silbe al equipo. En casa estamos obligados a atacar por lo que significa el Sevilla, fuera estamos más cómodos. Falta autoconfianza. Es duro que nos griten, pero el equipo ha trabajado y en el primer tiempo, con el 1-0, tuvimos una ocasión clarísima que hubiera cambiado el partido. Intentaremos mejorar ante el Hércules".