El Geta primero pasó miedo y luego tuvo vergüenza

Al Getafe le entró la tiritona en su regreso a Europa. La noche era fría, el público escaso y el miedo en el cuerpo duró hasta el minuto 80, cuando Pedro Ríos ejecutó con decisión, y lo más importante, con acierto, una falta al borde del área.

Por partes. Si bien es cierto que el Odense traía un halo de misterio por aquella eliminación al Madrid en 1994, lo más llamativo fue el vacío en las gradas. Dos mil personas si acaso, que al peso no representan ni al 20 por ciento de los aficionados habituales. Y lo habitual no es que el Geta juegue en Europa. Entonces, ¿por qué? Porque la entrada más barata era de 50 euros y los abonados tenían que pagar un suplemento de entre 15 y 30.

Con el balón en juego, el Getafe salió en busca del Odense abriendo mucho el campo, pero buscando la simetría encontró cierto desorden. Sinceramente, ninguno de los tres cambios de Míchel se ganó un aplauso. Víctor Sánchez porque no es lateral derecho y se le vio, Marcano por sus nervios y Borja por sus imprecisiones.

Para desgracia, Gavilán, que estrenaba brazalete de capitán y que tras marcar dos goles al Levante venía más crecido que el Ebro en febrero, se lesionó a los cinco minutos. Sufre rotura de los músculos isquiotibiales del muslo derecho. Le sustituyó Miku y no desmereció, ya que el venezolano fue de los pocos que buscó el regate, la línea de fondo y el gol.

El fantasma del Odense persiguiendo a Míchel se apareció en el 43', cuando Arizmendi introdujo en su propia puerta una falta sacada por Andreassen. El Getafe no es que estuviese negado, pero la lectura de la primera parte era clara: sabemos hacerlo mejor.

Entró Casquero y el Getafe apareció. Porque con él se vino arriba Parejo, y Boateng, y Arizmendi se puso a crear peligro hasta encontrar de nuevo otro gol, esta vez queriendo. Pedro Ríos, de falta, firmó el 2-1, pero aún había tiempo para sufrir por un penalti que cometió Víctor Sánchez en el 90' pero que el árbitro no vio.

Ángel Torres: "Soy responsable de los precios"

"El responsable de poner los precios soy yo y si la gente se tiene que meter con alguien que se meta conmigo. Esto es fútbol y cuesta lo que cuesta. El pasado domingo era gratis para los socios y sólo vinieron 6.000 personas, por lo que ahora tengo que felicitar a los 2.000 que han venido esta noche (por ayer). La victoria nos ha venido muy bien, aunque es cierto que ha sido muy sufrida y que hemos pasado miedo. Espero que lo lesionados se recuperen".

Míchel: "Apelamos al orgullo"

"No me ha parecido sorprendente el Odense, sino nuestra primera parte, que ha sido deslucida. No podemos entrar así a un partido europeo. En el descanso hemos hablado apelando al orgullo y los jugadores lo han entendido y le han dado la vuelta al marcador y a las sensaciones. Queremos que la afición se anime, pero comprendo a todas las partes. Estoy contento con el resultado, con los dos centrales y con algunas cosas más".