FÚTBOL FEMENINO
Las chicas del Middlesbrough jugarán en Corea del Norte para rememorar la gesta de 1966
Será el primer club europeo que pisará tierras norcoreanas, y su elección no es casualidad. Fue en Middlesbrough donde la selección de Corea del Norte disputó los partidos de la primera fase del Mundial de Inglaterra'66, en la que dieron la gran campanada venciendo a Italia y pasando a cuartos.
El equipo de fútbol femenino del Middlesbrough inglés viajará esta semana a la casi inaccesible Corea del Norte para jugar varios partidos en ese país, un gesto con el que se quiere conmemorar el décimo aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre ese país y el Reino Unido.
Las chicas del 'Boro' estarán en Corea del Norte del 18 al 22 de septiembre, disputarán varios amistosos con clubes norcoreanos y también impartirán clases a niños de ese país, destacó un comunicado de Koryo Tours, la agencia de viajes que colabora en la organización de esta singular visita.
Reino Unido ha pensado en este gesto teniendo en cuenta que el fútbol es el deporte más popular en Corea del Norte, donde su selección femenina ocupa el quinto lugar en el ránking mundial, subraya el comunicado.
En el Mundial'66, la selección norcoreana se convirtió, por su sorprendente juego y por su semejanza de colores con el equipo local, en el equipo favorito de los aficionados de Middlesbrough, que le animaron a muerte en todos los encuentros.
La identificación de los vecinos de la ciudad con la selección asiática fue tal que en los cuartos de final 2.000 hinchas de Middlesbrough viajaron 170 kilómetros hasta Liverpool para ver a "su" selección disputar el inolvidable encuentro contra Portugal, en el que los norcoreanos cayeron por 3-5 después de haber acabado la primera mitad con un 3-0 a su favor, en uno de los partidos más épicos de la historia de los Mundiales.
El Gobierno británico y Koryo Tours organizaron en 2002 un viaje de los supervivientes de aquel equipo norcoreano a Middlesbrough, donde fueron recibidos como auténticos héroes, en uno de los más curiosos intercambios que la cerrada Corea del Norte ha tenido con el mundo exterior en las últimas décadas.
Corea del Norte volvió este año a disputar un Mundial, el de Sudáfrica, aunque su actuación no fue comparable a la de 1966, ya que perdió todos los encuentros (entre ellos una humillante derrota por 7-0, otra vez contra Portugal) y quedó última del torneo.
En esta ocasión, no eran ingleses de la comarca de Yorkshire los que animaron a los norcoreanos, sino varios cientos de aficionados chinos disfrazados de aficionados del país vecino que habían sido pagados por el Gobierno de Pyongyang para tal fin.
La agencia de viajes británica Koryo Tours organiza viajes al aislado país comunista desde 1993, principalmente dedicados a extranjeros residentes o de paso por Pekín, de donde parten la mayoría de estos aventureros periplos.