César convierte en tres puntos el gol de Maduro

El Valencia tiene un chavalín que promete. Se llama César Sánchez y su DNI debe estar falsificado, porque dice que tiene 39 años cuando sus reflejos los quisieran para sí muchos de los porteros que están empezando en esto del fútbol. El de Coria sacó, entre otras varias, una mano a remate de espuela de Markus Rosenberg con la que evitó que el Racing se pusiera por delante en el marcador y tras el descanso le ganó la partida también al sueco en un uno contra uno que hizo de tres puntos el gol de Maduro. "¡Ave César!", gritaban por Mestalla.

El Racing de Miguel Ángel Portugal hizo honor a su fama de aguafiestas que tiene por Valencia, aunque esta vez -y tras cinco temporadas sin suceder- la victoria se la llevaron los de Emery. Fueron simple y llanamente mejores los cántabros durante buena parte del partido. Por cierto, dio la sensación en Mestalla que el Racing ha encontrado en el sueco Rosenberg su nuevo Zigic, aunque las estadísticas darán o quitarán la razón a este comentario. Lo que de momento dicen los números es que el Valencia suma seis puntos. Los de Emery sufrieron más que disfrutaron. Pese a ello, con el tiempo cumplido de la primera mitad, un cabezazo de Maduro -quien apareció de los cielos para decir 'aquí estoy yo y por algo soy titular con Holanda'- bastó al Valencia para sumar su segunda victoria en esta Liga y seguir pasando página de la era de los Villa y Silva.

Unai Emery: "En la primera parte sufrimos"

"Mestalla debe ser importante y la afición lo sabe. Aguantaron un primer tiempo en el que sufrimos y un segundo siendo un equipo más ofensivo y agresivo. La afición vio 11 jugadores que defendieron la camiseta del Valencia, que es al fin y al cabo lo que queremos transmitir a la afición. Estuvimos desajustados en la presión en la salida de balón, provocando situaciones de superioridad a favor del rival y dándoles oportunidades para que nos marcaran".

Portugal: "Vamos a seguir con la apuesta"

"El partido lo enfocamos bien tocando atrás, y los equipos luego te van cogiendo el truco. También el resultado marca mucho. Es una apuesta que estamos haciendo y vamos a ver si sale. Atrás queremos sacar el balón jugándolo, y cuando lo tiene el rival queremos presionar su salida. Los jugadores están tristes, pero no les puedes decir nada, había que insistir en lo mismo, sin recriminar nada en absoluto, porque hicimos el partido que había que hacer".