amistoso | china 1 - paraguay 1
China y Paraguay se reparten tablas sin gloria
El partido amaneció favorable para el equipo paraguayo, ya que sólo tuvo que esperar 7 minutos para adelantarse en el marcador, merced a un gol de cabeza de Lucas Barrios.
China y Paraguay empataron 1-1 el duelo amistoso que les enfrentó hoy en Nankín, en un partido en el que ninguno de los dos equipos brilló en demasía y que terminó en tablas merecidas.
El partido amaneció favorable para el equipo paraguayo, ya que sólo tuvo que esperar 7 minutos para adelantarse en el marcador, merced a un gol de cabeza de Lucas Barrios.
El delantero del Borussia Dortmund -nombrado mejor jugador del partido- remató solo en el área pequeña tras encontrarse con el rechace del larguero de otro cabezazo de Roque Santa Cruz, tras una meritoria jugada del joven zurdo Néstor Camacho, que regateó a tres defensas.
La selección china acusó el golpe y tardó en reaccionar. Hasta el minuto 20 no llegó el primer intento de los asiáticos, obra de su único delantero, Gao Lin, que voleó a bote pronto desde fuera del área, en un intento que se marchó lejos del palo izquierdo de Justo Villar.
Paraguay controlaba la situación, contemporizando las acciones con un centro del campo mejor asentado con el clásico 4-4-2 pero sin arriesgar en sus maniobras, mientras que China, distribuida en un sistema 4-2-3-1, solo llegaba con peligro en jugadas aisladas a contraataque.
Sin embargo, el panorama cambió en el minuto 33, con una buena jugada de combinación de China en la que Feng Renliang, centrocampista del equipo Shanghái Shenhua, llegó a la línea de fondo.
Su parábola superó por arriba a Justo Villar, que cubría el primer palo, y Gao Lin, ariete del Guangzhou Evergreen, sólo tuvo que empujar la pelota con la cabeza sobre la línea de gol para igualar la contienda.
El tanto espoleó a la escuadra asiática, que en los minutos siguientes avanzó metros y presionó a Paraguay, logrando otras ocasiones, como un duro disparo del escurridizo Feng Renliang desde fuera del área que el cancerbero paraguayo acertó a desviar a córner.
Tras el paso por los vestuarios, ambos equipos, que venían de perder sus compromisos anteriores (China cayó por 0-2 ante Irán, Paraguay hizo lo propio por 1-0 en Japón), buscaron la victoria pero con más corazón que cabeza. La mejor ocasión tras el descanso la protagonizó Roque Santa Cruz en el minuto 56, que se sacó un disparo seco desde fuera del área que obligó al meta chino a lucirse con una meritoria estirada.
Paraguay continuó sitiando la portería local. En el minuto 61 Osmar Molinas tuvo el gol en sus botas, pero otra vez la manopla de Zeng Cheng se interpuso en su camino, y en el 65 el árbitro anuló por fuera de juego un tanto de Lucas Barrios, que se aprovechaba de otro rebote.
Los cambios y las faltas continuas bajaron el ritmo del partido, pero encendieron los ánimos del banquillo visitante, con Paraguay protestando enérgicamente varias decisiones arbitrales.
China consiguió aguantar sus malos minutos y empezó a dominar en el segundo tramo de la parte con varias ocasiones para marcar.
La velocidad de línea de ataque hizo estragos en la defensa guaraní y las ocasiones locales también llegaron a pelota parada, como un córner que rozó el gol en el minuto 85.
En el último suspiro, dentro del descuento, un postrero chut de Santa Cruz estuvo muy cerca de decantar el choque para los cuartofinalistas de Sudáfrica, pero la zaga china desvió el tiro.