Liga Adelante | Elche
Bodipo puede apuntalar la delantera franjiverde
Su agente dice que "está cerrado", falta el OK de Lendoiro
Miguel Linares no será el último fichaje para la delantera del Elche. Al menos, ese es el deseo de los técnicos del conjunto ilicitano. A pocos días del inicio del campeonato de Liga, el técnico José Bordalás espera la llegada de un nuevo ariete. Los dos futbolistas con más opciones para hacerlo son Rodolfo Bodipo y Jesús Perera. Ambos saben del interés franjiverde y están a la espera de que sus clubes, Deportivo y Rayo Vallecano, acepten su marcha en los parámetros económicos que está dispuestá a asumir la entidad ilicitana.
Bodipo se desvinculó ayer del Vaslui rumano, equipo al que se marchó cedido hace un par de meses, como paso previo a su posible fichaje por el Elche. Tras jugar a principios de Liga, en los últimos partidos ni siquiera fue convocado porque el ecuatoguineano no se adaptó a su nuevo club. Por eso ha preferido poner punto y final a su aventura en el extranjero. "El acuerdo con el Vaslui ya está roto. Llevábamos 15 días negociando su salida. El acuerdo con el Elche es un hecho y sólo falta el visto bueno de Lendoiro para que le deje ir", dijo ayer su agente, Javi González. El ariete llegaría en calidad de cedido.
Rodolfo Bodipo, a sus 32 años, cuenta con una amplia experiencia en el fútbol español. Sus mejores temporadas las cuajó en el Racing de Santander y el Alavés. Con ambos clubes consiguió el ascenso a Primera División. En 2006 firmó por el Deportivo, aunque nada más aterrizar sufrió una importante lesión de rodilla. Una vez recuperado, nunca fue una opción preferencial para Lotina. La temporada pasada disputó 15 partidos de Liga, seis de ellos como titular.
Perera: "Me gustaría volver"
Si el interés por Bodipo no acaba en final feliz, la otra alternativa para el ataque es Perera. El extremeño, que el año pasado jugó en el Elche cedido por el Rayo, no cuenta para su equipo y su salida, a diferencia de Bodipo, está supeditada a la rescisión de la temporada de contrato que le queda. Perera, además, ha solicitado dos años de contrato para cambiar de residencia. "Me gustaría volver. Terminé muy bien la temporada y si me han llamado es porque saben lo que puedo aportar y están interesados en mí", dijo ayer el ariete. Pese a que en enero estuvo a punto de salir del equipo, la relación entre el jugador, Bordalás y Ramírez terminó bien y de ahí que sus caminos tengan opción de volver a unirse. Ya a la sombra de Molina no generó ningún conflicto en el vestuario y eso es un factor que puede jugar a su favor dado que, en caso de fichar, partiría por detrás de Linares y Ángel.