Esperpento en el Betis: Nsaliwa se vuelve a casa

Tamandani Nsaliwa. Así se llama otro de los bochornosos capítulos que está firmando el Betis en las últimas temporadas. Este desconocido futbolista nacido en Malawi, criado en Canadá y con pasaporte alemán llegó a Sevilla el pasado jueves. Teóricamente había alcanzado un acuerdo con los verdiblancos y sólo faltaban las 'rutinarias pruebas médicas', que iba a pasar a primera hora de la mañana del viernes. Y así fue. Pero no quedó del todo claro porque supuestamente sufría unas leves anomalías cardíacas.

Su fichaje quedó aparcado hasta ayer, tras los días festivos en la capital andaluza. Volvió a pasar más pruebas médicas por la mañana y por la tarde, y cuando todo el mundo esperaba el sí o el no en relación a su estado físico, la entidad emitió un comunicado en el que descartó su fichaje por no llegar a un acuerdo económico. Seis días después se marchará hoy a casa.

Pepe León, presidente del Betis, ha descartado su fichaje porque se trataba de un jugador desconocido. Pero el acuerdo económico que había alcanzado Luis Oliver era total y el fichaje estaba cerrado a la espera de que lo autorizara el presidente. Nsaliwa llega a coste cero al Betis e iba a perciber 300.000 euros brutos por temporada.

Otros ya lo han vivido antes

Desgraciadamente para la entidad verdiblanca, el capítulo vivido ayer recuerda a otros muy parecidos en años anteriores. El portero italiano Storari, que posteriormente recalaría en el Levante, vivió durante unos días en el Hotel Ciudad de Sevilla, pero tal como llegó se fue porque Lopera decidió contratar al portugués Ricardo. Dos años antes se vivió un caso todavía más parecido al de Nsaliwa y fue el del desconocido delantero brasileño Alexandre. El último jugador fue el del delantero mexicano Nery Castillo. Tenía todo acordado con Lopera, que al final fichó a Sergio García.