Mundial 2010 - Final | La intrahistoria
La juerga del Waldhotel desestabilizó a Holanda
En 1974 pocos tenían dudas de que Holanda sería campeona del mundo. La Naranja Mecánica practicaba su fútbol total y sus jugadores eran estrellas dentro y fuera del campo. Pero 'los Beatles del fútbol' protagonizaron una fiesta que les pasó factura.
Waldhotel en Hiltrup, Alemania. Noche del 2 de julio de 1974. Así lo cuentan René y Willy Van de Kerkhof en su biografía, Los Hermanos: "La noticia de que había unas chicas desnudas en la piscina corrió como la pólvora por las habitaciones. Al final, éramos unos 15 o 16 jugadores en la piscina. Durante dos horas lo pasamos fenomenal". Sin embargo nadie advirtió la presencia de un periodista de incógnito que se alojó en el hotel. Guido Frick, redactor del periódico Stuttgarter Nachrichten fue testigo de la fiesta, pero el escándalo lo desató el diario sensacionalista Bild, que tituló a toda página: ¡Cruyff, Sekt, nackte Mädchen und ein kühles Bad! (Cruyff, champán, chicas desnudas y un baño fresco). En el interior se hablaba de la supuesta "orgía" protagonizada por los jugadores en una maniobra claramente desestabilizadora, que logró enrarecer el ambiente. El seleccionador Rinus Michels simultaneaba su cargo con el de técnico del Barcelona, con el que jugaba en esos días la Copa del Generalísimo con el Real Madrid.
Auke Kok, periodista holandés cuenta con lujo de detalles lo acontencido en las horas siguientes en su libro Wij baren de besten (Fuimos los mejores, 1974). Las llamadas de las mujeres de los jugadores al hotel se sucedieron. Y, cómo recuerda el delegado de la expedición, Carel Akemann, "Johan fue de los que más explicaciones tuvo que dar a su esposa".
Al final, según relatan los Van de Kerkhof en su biografía: "Ella le dejó quedarse con la promesa de que nunca más estaría tanto tiempo lejos de casa". Antes de que cediera, se habla de una visita de un directivo a la mujer de Cruyff y de la intermediación del suegro del azulgrana. Cuatro años después, Cruyff renunció a jugar el Mundial de Argentina...
Así, el 7 de julio de 1974, con varios jugadores tratando de salvar su matrimonio, Holanda saltó al césped del Olímpico de Múnich para medirse a Alemania. Llevaban días sin pegar ojo. El resto de la historia es conocida...