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Liga BBVA | Zaragoza

El Zaragoza pide a Colunga que baje el precio al Recre

En La Romareda se intensifica la ofensiva por el delantero

Jorge Solans
<b>GOLEADOR. </b>Colunga fue clave con sus goles en el camino hacia la permanencia del Real Zaragoza.

El Real Zaragoza y Adrián Colunga, cedido desde enero por el Recreativo, pretenden seguir de la mano en el futuro cueste lo que cueste. Pese a que el Chupete Suazo limitó durante muchas jornadas los minutos de Colunga, su rendimiento fue sobresaliente y sus goles resultaron esenciales hacia la permanencia. El Zaragoza y el futbolista, satisfechos mutuamente, tienen un acuerdo por cuatro temporadas, así que ahora Colunga tiene que presionar al Recre para que le traspase al Zaragoza. Así se lo ha pedido el club aragonés a Luis Bernardo, el representante del jugador.

En Huelva hay predisposición a negociar por la enemistad mutua que afloró el año pasado entre Colunga y el Recre. No obstante, no hay intención de malvender al jugador. En 2008, el Recre pagó 2,7 millones de euros por Colunga a Las Palmas, que posee un porcentaje de una futura venta, así que pretende cerrar la operación en más de tres millones. El Zaragoza no puede llegar a esa cantidad, pero confía en que la presión del futbolista para continuar en La Romareda y la ausencia de otras ofertas suavice la postura del Recre.

Diego Costa.

Perdido Suazo por su elevado precio (ocho millones de euros), el Zaragoza quiere retener a Colunga para que compita por el puesto de '9' con Ikechukwu Uche, una vez superada la lesión de rodilla que le impidió jugar casi toda la temporada. O para que formen pareja. Además, el Zaragoza quiere la cesión de Diego Costa, que no termina de convencer a Quique Sánchez Flores para el Atlético.

Colunga, Uche y Costa componen el ataque soñado del Zaragoza, por su calidad y por sus diferentes cualidades, lo que otorgaría muchas variantes a Gay. Pero las pretensiones económicas del Recre por un lado y los diversos pretendientes de Diego Costa por otro dificultan las incorporaciones. Una vez que la continuidad del sistema defensivo está asegurada, el Zaragoza enfoca sus prioridades hacia los dos extremos del campo: la portería y el ataque.