2.000 hinchas presenciaron el entrenamiento portugués

Portugal regresó a su cuartel general de Magaleisburg nada más terminar el encuentro ante Costa de Marfil. El motivo es que Carlos Queiroz tenía programado ayer un entrenamiento por la mañana. Como es habitual, desde que Portugal se concentró el 14 de mayo en Covilha, la sesión sufrió un cambio de hora. En esta ocasión, la variación fue sólo de 30 minutos. De modo que comenzó a las 12:00 horas. Fue un entrenamiento a puerta abierta para el público y la Prensa, de ahí que 2.000 aficionados llenaron la grada del Bekker Schools para apoyar y dar ánimos a sus jugadores. A pesar del empate contra Costa de Marfil, los seguidores portugueses quisieron arropar a la selección de su país el día después del debut en el Mundial.

La sesión no contó con la presencia de los jugadores titulares ya que se quedaron trabajando en el gimnasio del hotel. De ahí que Queiroz organizara un partidillo de entrenamiento entre los suplentes ante Costa Marfil y un equipo de juveniles de la localidad de Magaleisburg. Precisamente, el futbolista más aclamado por todos los seguidores que acudieron a ver el entrenamiento fue el madridista Pepe, cuyo nombre fue coreado en repetidas ocasiones por los presentes. ­