"Se siente, se nota, Valencia es granota"

El levantinismo se hizo oír ayer en Valencia y lo hizo, como no podía ser de otro modo, en clave de celebración. La familia granota, compuesta por el equipo de Luis García y sus aficionados, se mostró más unida que nunca y paseó por las calles de la ciudad y por los lugares más emblemáticos, a los que se rindió visita, la ilusión por el regreso a Primera. El conjunto azulgrana visitó la Basílica de la Virgen de los Desamparados, la Diputación y el Ayuntamiento y lo hizo acompañado de miles de levantinistas que corearon los nombres de futbolistas, técnicos y también del presidente Quico Catalán.

El trayecto arrancó sobre las 19:00 horas en el Ciutat de València, desde donde partió el autobús con fotografías que se empezó a preparar para este momento la pasada semana. La primera visita obligada era a la 'Geperudeta', a la que los cuatro capitanes ofrecieron un bonito ramo de flores, mientras que Catalán le dedicó unas sentidas palabras de agradecimiento por su apoyo. De ahí, a la Diputación, donde se vio la complicidad entre el presidente y Alfonso Rus y en cuya sede los jugadores pudieron salir al balcón a cantar junto a sus aficionados. Uno de los cánticos más celebrados fue el de Rubén Suárez: "Se siente, se nota, Valencia es granota".

Ayuntamiento. El momento más esperado era la llegada al Consistorio, donde el Consejo estuvo hace sólo unos días para firmar la recalificación de los terrenos de Orriols. Allí les esperaba la alcaldesa, Rita Barberá, que les dirigió palabras emotivas. "Sois un equipo legendario, me siento orgullosa porque sois un claro ejemplo de superación. Habéis subido a Primera, donde siempre debéis estar". En la Plaza, alrededor de 3.000 aficionados se dejaban la garganta para clausurar una jornada de merecidas celebraciones.