Trabajó sin descanso, pero siempre lejos del área rival

Rooney fue de menos a más ante Estados Unidos. Su primera aparición llegó mediada la primera parte con un tímido disparo que blocó sin problemas Howard. Además sobre todo en la primera mitad, retrasó bastante su posición, ya que apenas le llegaron balones en los que crear algo de peligro y tuvo que iniciar las jugadas en la línea medular junto a Lampard y Gerrard. Su conexión con Heskey fue infructuosa y sólo hilvanó cinco pases con él. En cambio, conectó en mayor medida con el centro del campo, con Gerrard, 12 jugadas y con Lampard, 16. En la segunda parte entró más fuerte y lideró al equipo en el ataque, sobre todo en los últimos 25 minutos, en los que dejó patente toda la calidad que posee. Su ocasión más clara llegó en el minuto 74, cuando disparó a portería desde fuera del área y el balón salió rozando el palo. Se mostró bastante preciso en sus acciones y sólo perdió cuatro balones. Además dio dos asistencias de tres centros al área que realizó.