Mundial 2010 - Grupo A | Sudáfrica - México
México teme al árbitro más que a Sudáfrica
Un uzbeco pitará la inauguración entre vuvuzelas.
Noventa mil vuvuzelas sonando a la vez en el primer partido en África en la historia de los Mundiales. Así será el ambiente de esta tarde en el Soccer City de Johanesburgo, magno escenario de un partido entre la organizadora Sudáfrica y la Tri, el México de Javier Aguirre, de Rafa Márquez, Guardado, del Guille Franco, del mayor de los Dos Santos, de Cuauhtémoc Blanco...
La vuvuzela, aquella trompeta que imita el sonido de los elefantes, se ha convertido aquí, en una de las ciudades más peligrosas del mundo, en un arma tan importante como en el fútbol que puedan desarrollar los hombres de Carlos Alberto Parreira.
La de México es otra película. Estar en un Mundial no es casualidad, ni siquiera ser uno de los dos equipos que lo abren, ya que ha tenido cinco veces este honor. El partido empieza a las 07:00 AM en el DF. Desde las cinco, todo el país estará despierto, pendiente del árbitro, un uzbeco llamado Ravshan Irmatov. Allí le temen más que a los Pienaar y compañía. Jamás un país organizador ha caído en la primera fase. ¿Casualidad?
Sudáfrica pensó en Parreira para su participación en el tercer Mundial de la historia del país. Después de Francia-98 y Corea-Japón-02, el pase de fase se antoja como un reto tan bonito como doloroso si no se consigue. El país organizador de un Mundial siempre ha pasado la primera ronda. Con el recuerdo de las semifinales en la Copa Confederaciones, Parreira intentará sorprender pese a no tener ni al mejor equipo ni al más virtuoso. Pero tiene algo que nadie posee aquí: el poder de los Bafana Bafana, sus vuvuzuelas y su convencimiento por el triunfo... ¡en la final!.