Caos en Caravaca: "Manos arriba, esto es un atraco"

La explicación a la visita a Caravaca con motivo del Año Santo Jubilar tiene un motivo mortal y no divino: el dinero. La Federación cobrará casi un millón de euros en dos plazos por la pseudo conferencia de ayer y por el partido de esta noche en Murcia. El dinero lo aportará el patrocinador principal, que además se verá beneficiado por los incentivos fiscales que supone apoyar el Año Santo como Acontecimiento de Excepcional Interés Público, lo que supone la aplicación de beneficios fiscales establecidos en la Ley 49/2002 en cuanto a la realización de gastos de propaganda y publicidad que sirvan para la difusión de este acontecimiento.

Claro que, para ello fue necesario que Del Bosque, Casillas e Iniesta, se hicieran 180 kilómetros de un tirón, llegaran tarde al almuerzo de la Selección y tuvieran que escuchar los gritos de disgusto del pueblo de Caravaca, que les despidió a lo Fuenteovejuna, todos a una: "¡Manos arriba, esto en un atraco!", al sentirse decepcionados por el poco tiempo que, contra su voluntad, pudieron dedicarles los jugadores.

La conferencia de Prensa fue caótica, y a ella no llegó a tiempo ni siquiera el empleado de la FEF que se ocupa de la página web oficial de España. Las dos primeras filas estaban ocupadas por políticos locales, federativos e intermediarios, entre ellos el que montó el sarao, el mismo que llevó a España antes de la triste Confecup a jugar en Azerbayán. Los funcionarios de la FEF miraban para otro lado, como si el ridículo no fuera con ellos.

Mientras el grueso de las Selecciones ya están en Sudáfrica, la Selección sigue de bolos obligada por el afán recaudatorio de la FEF. Caravacaos.