El club apela al Factor Alcoraz ante el Cádiz

El Huesca ha pedido un último empujón a sus aficionados: quiere que El Alcoraz se convierta en una hoya a presión en la finalísima del domingo. Los jugadores más veteranos pidieron nada más acabar el partido en Villarreal que los aficionados recuperen el espíritu de los play-off para preparar una encerrona al Cádiz. El conjunto azulgrana está echando de menos los puntos que siempre le ha proporcionado su campo, donde no ha conseguido una victoria en los últimos cinco partidos. La última fue ante el Salamanca el 21 de marzo.

Los socios podrán comprar tres entradas a precios que irán de 5 a 10 euros dependiendo de la ubicación. "La clasificación dice que la situación está muy ajustada. Seguimos dependiendo de nosotros mismos, pero para el partido contra el Cádiz proponemos una serie de iniciativas que nos ayuden a llenar El Alcoraz, para que se convierta de nuevo en un fortín". Así hacía extensible Raúl Ojeda, gerente del club, la necesidad de que la grada esté llena. Ojeda también explicó que ya se han vendido 300 de las 1.500 entradas que hay a la venta. A los que sacaron sus entradas con anterioridad, el Huesca les ofrece otra gratis. Ante las peticiones del club gaditano, el Huesca les proporcionará aproximadamente 90, incluidas las de protocolo.

El presidente, Fernando Losfablos, quiso transmitir el sentimiento del Consejo de Administración: "Contra el Cádiz jugamos todos. Igual que en Villarreal el pase a Camacho lo dio la afición, ahora El Alcoraz será clave de nuevo en la historia del Huesca. Pongamos en marcha las gargantas y los corazones porque no podemos reblar", solicitó el presidente a los aficionados.

El club destinará el 25 por ciento de la recaudación a Cruz Roja, otro 25 por ciento al fútbol base, y el 50 para financiar los costes del desplazamiento de los aficionados que acompañen al equipo a Vigo en la última jornada.