Liga Adelante | Salamanca
El estadio Helmántico puede registrar un lleno histórico
Los socios entran gratis y viajarán más de 4.000 béticos.
Salamanca podría vivir un lleno que no se produce desde el ascenso en el año 2006 contra el Sevilla Atlético. Será el próximo domingo en el partidazo que le va a medir contra el Betis. Los charros se juegan la permanencia y los béticos el ascenso. Desde la capital hispalense llegarán al menos 4.000 seguidores. Esas son las localidades que ha enviado el club blanquinegro a un precio de 32 euros cada una.
Además de la 'invasión' bética, el club ha querido promover la asistencia de los seguidores salmantinos y regalará una localidad a todos los abonados adultos sin distinción. Los más de 4.000 aficionados que disponen de él pueden retirar otra entrada de Preferencia, lo que aseguraría más de 8.000 billetes de aficionados locales.
Por otro lado, todos los socios pueden retirar entradas a un precio más reducido del que tendrán los béticos (entre 5 y 15 euros). Todo apunta a que el campo registrará un lleno total o al menos estará muy cerca de conseguirlo. El Betis ocupará el Fondo Norte en su totalidad y parte de la zona de Preferencia y de Tribuna. El resto del campo será unionista entre los que se encontrarán los socios del Fondo Norte que tendrán que desplazarse, por motivos de seguridad, al Sur.
La recaudación promete ser suculenta ya que la taquilla total podría irse hasta los 30.000 euros.
Hugo Leal tiene complicado llegar al partido
La enfermería se vaciará casi por completo este fin de semana. Quique Martín y Raúl Gañán podrían salir de ella próximamente. El asturiano ya se ejerció en la mañana de ayer en solitario y volverá durante la semana al grupo. Otro de los capitanes, Raúl Gañán, se sigue tratando y ha mejorado de su tendinitis. Llegará a tiempo para el partido. Más complicado todavía lo tiene Hugo Leal cuya microrrotura le hace ser seria duda para recibir al Betis. La zona lesionada lo hace aun más difícil y aunque el jugador seguirá un plan específico tiene mucho riesgo de recaer. El portugués quiere jugar, pero está pendiente de la evolución de su lesión para uno de los encuentros más importantes del año.