Javi Martínez ve su salida al extranjero como última vía

Empieza a cundir el temor, más en la afición y parte del Athletic que en la propia directiva, de que algún club pueda poner encima de la mesa los 30 millones más el IVA correspondiente para fichar a Javi Martínez. Las últimas declaraciones del futbolista, en las que por primera vez ha dejado abierta la puerta a "pensar en ofertas" tras el Mundial, han hecho saltar las alarmas.

Y es lógico, porque el navarro tiene un gran mercado, tanto en el fútbol español como en el extranjero. Sin embargo, en caso de tener que abandonar el Athletic, contempla como prioridad quedarse en otro de los grandes de la Liga, Real Madrid o Barcelona. Lo de irse a la Premier, donde el Manchester City está loco por incorporarle, lo ve como una vía más remota.

No sólo el Real Madrid ha pensado en él, aunque no parezca ser una absoluta prioridad de Mourinho salvo que los Diarrá salgan del club, sino que también el Barcelona, en pleno proceso electoral, anda tras sus pasos. Si vende a Touré Yayá, por el que ya hay alguna petición, Pep Guardiola estaría encantado de integrarle en su plantilla.

De hecho, observará atentamente los partidos con España para ver cómo se mezcla en el juego con Xavi e Iniesta. Y todo dependería probablemente de cómo termine el culebrón Cesc, ya que el fondo de la caja azulgrana tampoco es interminable.

Innegociable.

El Athletic ya ha dicho una y otra vez que no negocia su pase, y en la junta se muestran firmes en este sentido.

Por si acaso, el club debe pensar un plan de emergencia, que consistiría en invertir esa tremenda cantidad económica en acometer un fichaje para esa posición (Raúl García), y al menos uno de los dos futbolistas que más le seducen a Joaquín Caparrós (Ander Herrera y Joseba Llorente), con prioridad para el mediapunta del Zaragoza. Repescar a Aduriz, que está en el mercado por los problemas económicos que atraviesa el Mallorca, sería más lógico, pero con esta directiva, casi inviable.