Rivas: "Espero ganar al Cádiz y que no baje"

Diego Rivas vuelve a Cádiz dos años después de participar en el descenso amarillo a Segunda B en el último minuto tras un penalti fallado. Jugaba cedido allí por la Real, y el sábado regresará al Carranza como txuri-urdin en busca de rematar un ascenso (hay opciones matemáticas de conseguirlo ese día) que acercaría a los andaluces a un nuevo descalabro. Para él será un partido de sentimientos divididos: "Sigo teniendo amigos allí, pero en 90 minutos los objetivos estarán enfrentados. Queremos ganar y espero que el Cádiz se salve".

El mediocentro manchego habló del gran ambiente que les espera en el Carranza: "Su hinchada es más caliente que la de Sevilla y anima muchísimo. De los estadios en los que he estado, para mí, si no es la mejor afición, está cerca de serlo".

Rivas es consciente de que la Real tiene opciones de subir el sábado: "Todo se puede dar, pero lo más importante es ganar en Cádiz. Saber eso no nos produce ansiedad, porque vemos que cada día nuestro objetivo está más cerca y ponemos más ganas". No dio importancia al maleficio realista en Cádiz, donde nunca ha ganado: "Las estadísticas están para romperlas y qué mejor escenario y objetivo que éstos".

Entrenamiento especial en Puio

La Real vivió ayer una bonita jornada festiva en el barrio donostiarra de Puio. La plantilla trasladó hasta allí su primera sesión semanal para inaugurar el nuevo campo de hierba artificial de San Sebastián. Las gradas se llenaron de niños que invadieron el césped al final y Griezmann, Nsue, Xabi Prieto, Elustondo y Lasarte fueron los más solicitados. Los encargados de seguridad tuvieron problemas para controlar a los seguidores. El ascenso está ya muy cerca y la afición demostró a la plantilla realista su confianza y apoyo.