"Mi adiós lo va a decidir el entrenador, no yo"

Manuel Pablo calificó la temporada del Depor con un notable. ¿Coincide?

Si miras la clasificación hay que decir que fue notable, pero las sensaciones no son las mismas por el tramo final de Liga. Para los que se salvaron en la última jornada fue una fiesta, pero para nosotros fue distinto.

¿Cuál es el objetivo para la próxima temporada?

Mantener la categoría, pero también esperando por si algún año se puede entrar en Europa. Sería genial para el club y para seguir creciendo.

Su temporada ha sido extraña. Empezó fenomenal en el Bernabéu, casi desapareció del equipo y terminó a un gran nivel. ¿Cómo la valora?

He tenido mis momentos, como dices quizás mejor al comienzo y al final. Durante el medio fue más intermitente, incluso tuve poca presencia. Yo intento ayudar lo máximo posible, pero esto es así y la decisión es del entrenador.

¿Su buen rendimiento en el final de la Liga le anima a pensar que esto no se acabó?

Para mí es importante demostrar que estoy en condiciones de competir. Me ilusiona y espero seguir así.

Su último partido de Liga fue en San Mamés y se despedía Etxeberria. ¿Se le pasaron muchas cosas por la cabeza?

No le doy vueltas a las situaciones, sobre todo las futuras. Sé que todo va a llegar y hay que llevarlo con naturalidad, es ley de vida. Lo de Etxebe fue muy bonito y hay que agradecérselo así a los jugadores que han estado tantos años en la élite haciendo del fútbol un espectáculo.

Su nuevo contrato es por cinco temporadas y usted decidirá cuando se retira. ¿Es mucha responsabilidad que uno mismo decida su adiós?

Yo no diría tanto. El año que viene es una temporada normal como jugador, y la siguiente será una decisión del entrenador. Va a ser una decisión más de él que mía. Si él considera que ya se ha cumplido mi ciclo y que no puedo aportar más dentro del campo, lo aceptaré así. Y si considera que puedo ayudar otro año, también lo aceptaré.

Hay algo a su favor. Puede presumir de ser uno de los tres jugadores no han tenido lesiones este año.

Físicamente no he tenido problemas, claro que cuando tienes más ritmo y partidos, te encuentras mejor.

¿Tiene alguna secuela de su lesión?

Nada de nada. Cuando pasas una lesión tan larga es muy complicado volver a estar al cien por cien. Sólo lo logras con partidos, que son los que te permiten coger la chispa necesaria. Me costó mi tiempo, pero ya he cogido el nivel.

¿Todavía se divierte jugando al fútbol?

Para mí es lo más importante. Siempre intento disfrutar y hacerlo lo mejor posible

Con el bajón del Depor en estos últimos años y su calidad, ¿cree que tiene mayor responsabilidad todavía?

No lo creo, al contrario. Siempre he jugado lo mejor que sé. Según pasan los años y tienes mayor experiencia, confías en lo que haces y asumes esa responsabilidad; nada más.

Hay quien dice que Lendoiro lo quiere en el equipo porque controla el vestuario.

Todo tiene que ver. Intento ayudar dentro del campo y fuera. Aportar los conocimientos y experiencia estos años en el fútbol a todo lo que conlleva estar en un vestuario.

Lo cierto es que el vestuario llevó muy bien los problemas que hubo con los pagos...

El vestuario es uno de nuestros fuertes. El Depor tiene un grupo muy bueno y eso es muy importante para trabajar a gusto. No nos podemos quejar y hay que utilizarlo en beneficio del equipo.

Y cuando ya no esté dentro del vestuario, ¿dónde se ve en el club?

No lo sé, no hable nada en concreto con el presidente. Lo dejamos abierto. Cuando se acabe mi tiempo como jugador, miraremos lo que es mejor según las necesidades del club.

¿Cómo lleva el curso de entrenador?

Tengo el primer y segundo nivel; me falta el tercero.

¿Lo va a terminar este año?

No, ahora no es mi idea. Cuando deje de jugar al fútbol me tomaré un tiempito para pensarlo. Aún no lo veo tan cercano, hay tiempo.

Hay gente que ve a Valerón en un futuro de entrenador, otro como un Quini, otro como embajador del Depor... ¿Dónde se ve Valerón?

En ningún sitio en especial. Estaré en el que el club crea que puedo aportar más.

En teoría su cargo será el de asesor del presidente...

(Risas) Hasta me siento incómodo porque el presidente tenga tanta confianza en mí. Intento tomármelo con naturalidad y seguir siendo el que soy. Opino y hablo como siempre lo he sentido. Sólo intento ayudar con los conocimientos que tengo después de tantos años en el club.

Bueno, si le parece entonces, lo dejamos como ojeador de jugadores. ¿Se ve en ese puesto?

No lo sé, la verdad es que no puedo contestar. Pero no es algo que me disguste. Todo lo que tiene que ver con el fútbol y lo que he vivido dentro y fuera de los terrenos de juego, es algo me gusta. Otra cosa diferente es saber si podré hacer bien las cosas.

Algo tendrá usted, porque hasta ahora ningún jugador del Depor se ha quedado en el club tras retirarse.

No lo sé. Es una situación diferente. Ha sido una decisión del presi. Yo me siento a gusto e identificado con lo que significa el Deportivo después de tantos años aquí.

Cuando llegue el momento, ¿una de sus prioridades será mejorar la relación entre club y ex jugadores?

Es un tema complicado. A veces es difícil, porque tiene que existir una misma manera de pensar y tener cosas en común. Si hasta ahora no se ha hecho así, será porque el presi no ha encontrado a nadie para estar ahí.

No lo digo por quedarse en el club, me refiero al trato con los veteranos.

Es cierto que no es una relación muy fluida. Pero son cosas de la vida y personales en las que no puedo opinar. Pero yo siempre voy a hablar claro y decir lo que crea que es más conveniente.