Etxebe deja el fútbol rodeado de amigos con su dorsal 17

Joseba Etxeberria culminó su serie de homenajes con una cita preciosa en Menorca, donde el Athletic ganó 3-2 a un equipo formados por ex compañeros en el club rojiblanco y la Selección. Fue una tarde entrañable, llena de detalles en forma de cariño y también de golazos. El deportivista Sergio se llevó la palma con dos lanzamientos de exposición imposibles para Iraizoz. También Muñoz puso su granito de arena con un disparo a la escuadra de Aranzubia. Lo celebraron de manera muy especial sus ex compañeros, el navarro se marcha pero también queda en el corazón de ellos.

Sólo el '17'. La organización del evento fue perfecta y se juntaron nada menos que 2.500 espectadores en el campo del Sporting Mahonés, cuya hierba alta favoreció que el ritmo de juego no fuese muy alto, aunque también conllevó una mala noticia por el esguince de Santi Ezquerro, que dejó el campo apoyado en los médicos. Ambos equipos lucieron en sus espaldas el número 17, en homenaje al gran capitán.

El tándem de la Selección de Euskadi, Iribar-Etxarri, se adelantó con un gol oportunismo de Toquero, que se mostró como siempre inquietante. Rebañó un balón a Aranzubia y lo mandó mansamente a la red. Etxeberria se mostraba una y otra vez con ganas de agradar e inquieto en el desmarque buscando el gol, pero Alkorta mantuvo el tipo. Los viejos leones estuvieron a gran altura, bien situados siempre y moviendo la pelota con criterio.

El dúo Valverde-Aspiazu dio paso entonces a Sergio y el partido cambió de manera radical, con un Urzaiz muy activo. Dos zarpazos del medio deportivista, que se entendió bien con Baraja, voltearon el marcador. Ya en la segunda parte, Muñoz y Luis Prieto, en propia meta alargando un mal fario desde el Camp Nou, pusieron el 3-2 antes de que Joseba Etxeberria, en loor de multitudes, fuese relevado por Tiko en medio de una preciosa y prolongada ovación.

Fue precioso comprobar la cantidad de camisetas rojiblancas que había en la isla. Muchas de aficionados locales y otras de amigos del futbolista y simpatizantes llegados desde suelo bilbaíno, entre ellos el ex técnico del Bizkaia Bilbao Basket, Txus Vidorreta, acompañado de una gran txapela junto a sus amigos de la Peña Joseba Etxeberria Bar Okela.

Tras el pitido final, hubo invasión de campo, regalos de camisetas a los aficionados y fotos y firmas a decenas. Entre los más estrujados, el único león que supera a Etxeberria en partidos de Liga, Jose Angel Iribar. Si el ex portero fue cojonudo, el de Elgoibar no le anda a la zaga. Hasta siempre, crack.