El Bayern toma contacto con el Bernabeu

El Bayern Múnich aprovechó la última sesión preparatoria antes de la final de la Liga de Campeones que le va a enfrentar, el sábado, al Inter Milán, para que los componentes de su plantilla tomaran contacto con el escenario del encuentro que puede devolver al club germano a la cima futbolística del Viejo Continente.

Louis Van Gaal tiró de los derechos que dispone cada equipo para ensayar, en la víspera, en el recinto del partido, y ejercitó a sus futbolistas durante una hora sobre el césped del estadio Santiago Bernabeu.

En contra de la decisión de su colega, el portugués Jose Mourinho, que optó por centralizar todos los entrenamientos en el estadio Alfredo Di Stefano de la Ciudad Deportiva de Valdebebas y que renunció a hacer uso del campo donde juega el Real Madrid, el preparador holandés tiró de lo tradicional.

Toda su plantilla saltó al terreno de juego a las 17.00 horas. Las gradas vacías y un viejo conocido, el holandés Ronald Koeman, que presenció, acomodado en el palco, como se manejaban los futbolistas de su compatriota.

Los integrantes del equipo alemán se ''escondieron'' en la mitad del campo. Los germanos se refugiaron a la sombra, que partía por dos el césped. Fue en ese espacio donde realizaron los ejercicios de preparación, de calentamiento. Estiramientos de entrada para acentuar la intensidad de los ejercicios.

Después, separados en grupos y con un plan específico para los porteros, los jugadores de campo centraron el aspecto físico. Después llegó el balón, unos rondos ya en todo el campo. Con el silencio de alrededor. Nada que ver con el bullicio y ruido que aguarda el sábado.

Las acciones a balón parado ocuparon parte del tiempo empleado por el técnico holandés. Un aspecto que puede ser determinante para inclinar el choque a un lado u a otro.

Van Gaal extendió el entrenamiento oficial, de puertas abiertas para los medios de comunicación, durante toda la hora que le dispuso la organización. El doble de tiempo que dispuso Mourinho, que apenas ejercitó a sus jugadores durante 35 minutos en Valdebebas.

La sesión fue intensa y Van Gaal alentó permanentemente a sus jugadores. Es la estrategia que le ha llevado a la final y la que pretende mantener para devolver al Bayern al éxito.