Europa League | Atlético de Madrid
"Y ahora queremos al Bayern en la Supercopa"
Vengar la maldición del 74 para enterrar todos los fantasmas.
El Atlético recuperó en Hamburgo un poquito del prestigio que se ha ido dejando en el camino a lo largo de los últimos años. En el sentir de jugadores, cuerpo técnico y plantilla se ha instalado la responsabilidad de no dejar escapar este momento y transformarlo en el punto de inflexión definitivo. En Hamburgo, con la euforia latente, en los vestuarios se empezaba a planear divisando el horizonte deportivo con unas posibilidades históricas que no se pueden dejar escapar.
Algunos ya pedían al Bayern en la final de la Supercopa "para vengar a los del 74", un guiño a la generación de los 70 que se dejó la Copa de Europa ante el equipo bávaro en el último suspiro. Y a los veteranos de aquella batalla no les importaría, en absoluto. Esa maldición del Pupas ha perseguido desde entonces al Atlético y ya va siendo hora de terminar con esa excusa y enterrar definitivamente esos fantasmas. "La gesta debería ser importante por sí misma, por proclamarse campeón europeo, pero los de corazón rojiblanco no podemos esconder que ganarle al Bayern nos dejaría un regusto especial", relata Miguel Reina, que fue el portero en aquella final contra el Bayern y que reconoce que vivió "muy emocionado" el triunfo rojiblanco en Hamburgo. El ex guardameta estaría encantado que los Forlán, Agüero, Simao, Reyes y compañía liquidaran de un plumazo esa maldición e incluso que antes sumen el segundo título llevándose la Copa el próximo miércoles. Eso significaría poder jugar las dos Supercopas y recuperar en pocos meses el prestigio perdido. "Ya lo han hecho un poco con este título europeo porque 48 años sin ganar nada a nivel continental era mucho para este club", explica Salcedo, otro de los participantes en la única final de Copa de Europa que ha disputado el Atlético.
También Armando Ufarte, un hombre acostumbrado a ganar finales con el Atlético, disfrutó con la gesta colchonera y aunque cree que "aquel duelo con el Bayern ya pasó, sí que sería un premio bonito para la afición ganarle al Bayern, uno de los más grandes de Europa, y volver a visitar Neptuno" Y es que ayer el dios se dio un gigantesco baño de multitudes cuando la comitiva rojiblanca, que había recorrido la ciudad, acabó rindiendo pleitesía allí a la afición. A los cerca de 200.000 colchoneros que siguieron a su equipo durante la fiesta en Madrid y a los otros miles.
La marea de seguidores que había seguido a sus ídolos por toda la capital, acabó arropando a los suyos en el momento de catarsis rojiblanca que llevaban 14 años persiguiendo. Al grito de "Sí, sí, sí, la Copa ya está aquí", unos 45.000 hinchas recibieron al autobús del equipo. Antonio López, el capitán, se encaramó entonces a la pasarela que conducía a la estatua de Neptuno y desde allí dedicó el triunfo "a todos los atléticos" y después fue llamando uno a uno a sus compañeros.
Todos tuvieron la oportunidad de dirigirse a su gente y todos manifestaron su deseo de "volver aquí el próximo jueves". Los cánticos, las bromas y la fiesta se extendió por el andamiaje con la plantilla y la afición como protagonista. El momento de éxtasis colchonero llegó cuando Antonio López se encaramó a la estatua para ponerle al dios la bufanda rojiblanca. "Por fin".