Germanor a medias

Para el Villarreal es el partido de la temporada. Para el Valencia, los minutos de la basura, exactamente 180 minutos, los que quedan para terminar una Liga en la que ha hecho los deberes de manera brillante hasta sobrarle dos partidos. Por eso, los chés llegan desenchufados a El Madrigal, con su artillería enfundada (Villa y Silva se quedan en casa) y con el resto de jugadores desconectados de la máxima tensión necesaria para afrontar un encuentro clave, porque para ellos ya no lo es. Y todo eso se traduce en que el Submarino tendrá más facilidades de las habituales para superar a su vecinos, es una germanor encubierta porque no es que el Valencia regale los puntos sino que pondrá menos en la balanza, porque no le hace falta correr ningún riesgo y porque ya ha machacado lo suficiente a sus intocables como para premiarles con un descanso. Premio para los mundialistas y para el Villarreal, que celebra por lo bajini esta medida.

Pero que nadie piense que los de Garrido no podrían con un rival en estado puro. El valenciano ha ganado todos sus partidos de local salvo el del Barça y bajo su mando el cuadro amarillo ha vuelto a funcionar, a recuperar su identidad y a remontar en la tabla hasta pelear por Europa cuando él llegó bajo el temor del descenso. Su campaña es notable, sobresaliente la de la Emery, y espera ponerle el colofón de sumar seis puntos y que pinche el Getafe para seguir viajando por el continente. Se lo merece, aunque sea en la clase económica y viendo cómo los chés tienen plaza ya en la zona vip de la Champions.

Ensayo general.

Aunque parte de los mundialistas chés no viajen para darles descanso, lo cierto es que la ausencia de Villa y Silva suena ya a ensayo general de cómo será la vida sin ellos la próxima temporada. Veremos qué pasa, pero tiene esa pinta. Por su parte, es de esperar un Submarino que le meta ritmo y tensión al derbi para apagar los ánimos de los valencianistas más entusiastas y es que Zigic, el Chori o Vicente no pueden desaprovechar ningún encuentro para demostrar cosas, por lo que para ellos la Liga aún no ha acabado. Ante su empuje, el Villarreal apostará por Llorente y Nilmar respaldados por jugones. Salir con todo es una declaración de intenciones y dejarte las armas en casa, también, aunque la distancia es la misma que hay entre haber logrado ya tu objetivo y no haberlo hecho.

El Villarreal, en Europa si gana y no lo hace el Getafe

Las cuentas del Villarreal para acostarse hoy en puestos europeos son muy sencillas. El conjunto de Juan Carlos Garrido necesita sumar los tres puntos contra el Valencia y que el Getafe no consiga la victoria en el Coliseum ante el Málaga. Si los azulones perdieran ante el conjunto andaluz, que lucha por escapar de los puestos de descenso, al Submarino le valdría con el empate en el derbi para colocarse sexto, siempre que el Athletic de Bilbao, que se encuentra un punto por detrás, no se haga con el triunfo en el Bernabéu ante el Real Madrid.