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Liga Adelante | Elche

"El Elche es el equipo más fuerte de cara al ascenso"

Juli confía en las posibilidades del conjunto franjiverde

Eloy Licerán
<b>DE PATA NEGRA. </b>Juli, ayer,  cortando jamón en el Restaurante El Pernil de Elche.
fito gonzález

Julián Cerdá Vicente, Juli, fue ayer el protagonista de las Tertulias Franjiverdes de El Pernil. El centrocampista alcoyano del Elche repasó la actualidad del club y se mostró optimista de cara al objetivo del ascenso. "Al equipo que más fuerte veo ahora mismo para conseguir el ascenso es el Elche. No lo digo porque sea mi equipo, sino porque estamos siguiendo una buena línea y no le tenemos miedo a nadie", comentó Juli.

El futbolista del Elche es consciente de que el Martínez Valero será una olla a presión el próximo viernes, a pesar de ello considera que "el equipo no está presionado". "Es cierto que va a ir mucha gente y que espera una victoria, pero nosotros estamos haciendo lo que nos gusta y además podemos cumplir el sueño de muchas personas", argumentó.

Juli reconoció que la afición "sabe que lo estamos dando todo por conseguir estar el próximo año en Primera y eso sé que lo valoran, pero ascender depende de muchos factores y si finalmente no lo conseguimos tendremos que felicitar a los demás". En cuanto al número de puntos que harán falta para ascender a final de temporada no se marcó ninguna cifra. "A mí, personalmente, no me gusta mirar más allá, siempre he sido así, me gusta vivir el presente porque puedes pensar cosas, pero el fútbol es muy cambiante y luego te llevas sorpresas", dijo, pero a su vez aseguró que superar la barrera de los 70 puntos "sería una bonita cifra para terminar el año".

"En el partido contra el Betis terminé mareado"

Juli fue uno de los jugadores más destacados del último encuentro contra el Betis. Pero su papel en el partido tiene un mayor mérito después de conocer lo que pasó las horas anteriores al importante choque, que según el jugador "ha marcado nuestra confirmación después de haber llevado una buena línea". El alcoyano sufrió una gastroenteritis durante la semana que no abandonó hasta un día después del choque. "Pasé tres días antes del partido que no se los deseo a nadie. De hecho, antes de salir al campo tuve que volver a medicarme porque no me encontraba bien", explicó. A pesar de ello disputó 53 minutos en los que hizo un gol y una asistencia. "Al poco de empezar la segunda parte pedí el cambio porque me sentía sin fuerzas, y cuando llegué al banquillo me dijeron que estaba muy pálido. De hecho, me mareé y no podía ver lo que ocurría en el campo", finalizó.