"No hubo nada grave para provocar dos expulsiones"

Nadie responsabiliza a Muñiz Fernández de la derrota el pasado sábado en el Campo Nou, pero al Xerez le siguen midiendo con un rasero distinto al de los demás equipos de Primnera. Sin dar una sola patada en Barcelona, el equipo de Gorosito terminó el encuentro con nueve jugadores y con muchos tarjeteados, entre ellos Leandro y Casado, que se perderán el partido ante el Almería. Los xerecistas volvieron a sentir la impotencia ante los arbitrajes. Así lo refleja Vicente Moreno: "Fue la reacción de impotencia de algún compañero, pero no existió ninguna jugada grave para que hubiera dos expulsiones. No fue para tanto. No creo que hayamos sido un equipo bronco o duro".

Mario Bermejo, por su parte, entiende que "el mismo árbitro se enredó con los últimos minutos. La tarjeta de Alustiza es injusta y estúpida. No fue decisivo en el resultado, pero no se complicó en ningún momento. Hubo un codazo cerca del banquillo en la que podría haber sacado una roja para ellos, pero todo ha sido al revés". En cuanto a las expulsiones, Gorosito no quiso incidir porque "tenemos que verlo por televisión", diciendo que "nuestros jugadores tenían las pulsaciones muy altas".

El Xerez nunca le ha echado la culpa de su situación a los arbitrajes, pero desde la plantilla se ha pedido reiteradamente respeto. "Hay una forma de medir a unos equipos y otra a otros", insisten los futbolistas.