Ben Sahar
"En Chelsea me llegué a sentir solo; aquí soy feliz"
En un castellano sorprendentemente correcto, Ben Sahar charló con AS de su momento físico y mental, del equipo, el club y hasta de lo "especial" que es la afición perica. Llegaron los primeros rayos de sol a Sant Adrià. "¿Hará tanto calor en verano?", nos preguntó, atónito. Parece que sí.
¿Cómo está, Ben?
Todo en orden... Y tratando de hablar cada día mejor el castellano. Hace tres meses que me siento mucho mejor, que me entreno bien.
¿Es que antes de esos tres meses tuvo algún problema que desconociéramos?
Nada en especial, ningún problema, pero hay cosas que no sabes cuando llegas a un nuevo club. No podía darlo todo de mí. Necesitaba adaptarme. Ahora me siento mucho mejor, voy continuamente a más.
A pesar de ello, ¿está jugando tanto como desearía o hubiera imaginado al principio?
Pienso que poco a poco voy jugando más. He participado en tres de los últimos cuatro partidos, y en dos de ellos alrededor de media hora. A veces necesito paciencia. Este es mi primer año en el Espanyol, Sé que no juego mucho pero así es el fútbol. Sé que poco a poco sumaré minutos y esperaré mi oportunidad. Si es el año que viene, mejor que mejor.
Parece más concienciado que hace unos meses, cuando pedía tener más minutos. ¿Habló Pochettino con usted?
Sí, hablamos y me explicó lo que este primer curso debía significar para mí. Este año es para aprender: de la Liga española, del juego diferente que practica el equipo respecto a los conjuntos y países donde yo había estado antes... Me dijo que no dejara de entrenarme fuerte y que, obviamente, no dejase de aprovechar cada oportunidad que me diera. No jugar, no tener continuidad, no es algo sencillo, pero con paciencia lo estoy consiguiendo.
¿Es feliz?
No dude de que ahora mismo soy feliz aquí y el año que viene pretendo seguir en este club. De hecho, la temporada próxima es muy importante para mí. Digamos que este año estoy cogiendo fuerzas para la próxima campaña, sin dejar de lado las cinco jornadas que nos quedan de esta Liga.
¿Cómo vivió la llegada en enero de Dani Osvaldo, tratándose de otro delantero?
Su aterrizaje lo viví positivamente. Me encanta que haya buenos delanteros en la misma plantilla, porque eso añade un aliciente al trabajo diario, a la competencia. Y quien se supone que está mejor, pues juega. Lleva seis goles, así que ahora mismo es importante para el club. Yo estoy tranquilo, porque sé que mi momento va a llegar; no sé si en el próximo partido o la temporada que viene, pero va a llegar. Y entonces lo aprovecharé.
Habla mucho de la próxima temporada. Por la juventud de la plantilla, ¿se podría decir que si el Espanyol tiene buen presente aún mejor es el futuro que se avecina?
Mire, actualmente en la mayoría de partidos hay hasta cinco titulares que rondan los 20 años de edad. Eso es muy bueno. El sábado pasado pudimos ganar al Barça, lo que quiere decir que podemos ganar a cualquiera. Ahora la clave es que seamos capaces de jugar así de bien fuera de casa.
Porque en casa lo están bordando. ¿Le sorprende el talante de la afición españolista?
La gente del Espanyol es algo muy especial. Yo ya sabía lo que es un derbi en Israel o en Inglaterra, pero lo que vi el sábado fue impresionante. Me encantó jugar, aunque apenas fueran diez minutos, sólo para contagiarme de ese gran ambiente de Cornellà-El Prat.
Da la impresión de que se encuentra más cómodo aquí que en un equipazo como el Chelsea, de donde vino.
El Chelsea es un club muy grande pero a veces me sentía solo. Aquí la gente está mucho más cercana, es como una gran familia. Lo valoro mucho y por eso soy feliz. He jugado mucho fuera de Israel y para mí esta sensación es muy importante. Por eso quiero continuar aquí y lo daré todo por este club.
¿Le extrañó que el Barcelona criticase tan duramente tanto el juego del Espanyol como la labor del árbitro?
Pasa algo parecido en Londres, si el West Ham supera al Chelsea; o en Manchester, entre el City y el United. Cuando el Barça no gana siempre debe decir algo del Espanyol o del árbitro. Pero nosotros hicimos nuestro trabajo, un partido muy grande. Mis amigos en Israel lo vieron y me llamaron diciéndome que pocas veces habían visto un Espanyol así, con esa intensidad y ese corazón. Y si Osvaldo llega a meter aquella ocasión, no sé qué hubiera pasado...
Quien no está en su mejor momento es su ídolo de infancia, Thierry Henry...
Cierto, lo adoré cuando él jugaba en el Arsenal y yo era un niño. Y cuando coincidí por primera vez con él me encantó. Pero no está jugando con la clase que demostraba antes.
En fin, Ben, mucha suerte.
Muchas gracias. Espero devolver tanto cariño como el que todo el Espanyol y su gente me están dando.