Cada loco con su tema

Cuando un equipo se pasa el año rondando el descenso, su situación responderá a una lógica más o menos evidente. La misma que cuando otro equipo camina durante casi siete meses entre los cinco primeros puestos. Razonar la situación del Zaragoza durante todo el año no nos cuesta nada; entender cómo ha logrado Manzano tener al Mallorca en las puertas de Europa, nos cuesta más. Hasta que uno mira con atención a sus jugadores (a los jugadores, no a sus nombres) y observa el funcionamiento colectivo...

Como diría Cortázar, hay cronopios y hay famas. Como nadie está bien seguro de lo que es eso, vale aplicarlo al fútbol. Hay equipos hechos de nombres y hay equipos hechos de fútbol. El Mallorca es uno de ellos. Por eso llega a La Romareda con dos pies en la Europa League y un ojo en las vacilaciones del Sevilla y la Champions. Porque tiene al Chori, por el despliegue de Aduriz y Webó, la templanza de Borja o su solidez en el fondo. Hoy pierde a Varela, lo que obligará a Manzano a una recomposición. Habrá que ver si opta por Borja tirado a un lado o por adelantar a Mattioni y jugar atrás con Josemi. Así terminó frente al Valencia.

Decisivo.

El equipo aragonés, mientras, ha señalado con generosos neones la importancia decisiva de este partido. Aquí cada loco va con su tema. Aquéllos con Europa, éstos con la supervivencia. Es Villabajo frente a Villarriba. Regresa Ander para escoltar a Suazo y Gay insinuó que Pulido relevará a Diogo. La lastimosa impresión de Pamplona son las cosas de la mediocridad. El equipo está para lo que está, salvarse y punto. Ganando hoy, eso quedaría a un triunfo.