Un partido para soñar

El Celta recibe al Real Unión con la ilusión renovada después de encadenar tres victorias consecutivas. De la noche a la mañana, todo se le ha puesto de cara a los de Eusebio, que si logran enlazar el cuarto triunfo seguido en Liga (algo que no consiguen desde enero de 2009) podrán empezar a soñar con milagros.

En la plantilla celeste hay ya quien habla de "metas más altas", aunque también existe quien prefiere el discurso de la (¿falsa?) modestia y hacer referencia a los escasos siete puntos que les separan del descenso actualmente. Pero, quien más, quien menos, todos los futbolistas le han echado un ojo a los puntos que les alejan de la tercera plaza: nueve, una distancia enjugable.

Para ello, ganar al peor equipo a domicilio, el Real Unión, es inexcusable. Será una oportunidad de oro para demostrar que el Celta ha crecido realmente y los últimos triunfos no han sido fruto de la casualidad. Hasta el momento, cada vez que ha habido la ocasión de pegar un salto ha acabado con un golpetazo contra el suelo. Los vigueses no han sabido manejar bien la presión y en este encuentro tendrán una nueva reválida.

Vendetta.

También podrán los celestes vengarse de la sonrojante derrota que encajaron en la primera vuelta en el Stadium Gal. El Real Unión desnudó las carencias viguesas y en el plantel céltico perviven las ganas de revancha.

La alineación de Eusebio será la misma que ganó en Vallecas. Ahora que le están saliendo bien las cosas por fin, no tendría ningún sentido que el vallisoletano cambiase de planes. Trashorras volverá a llevar la manija con su consabida calidad, Abalo pondrá el desborde por banda y Cellerino buscará engordar su cuenta goleadora. El Celta se agarra a su particular clavo ardiendo.

El morbo lo pondrá la presencia de Goran Maric

Goran Maric será una de las principales atracciones del encuentro de Balaídos. El futbolista formado en la cantera de A Madroa fichó por el Real Unión en el mercado de invierno y se enfrentará por primera vez al equipo en el que se hizo como futbolista. El que fuera capitán del Celta B se marchó de Vigo dolido porque no le dieron la oportunidad de dar el salto a la primera plantilla. Esta semana ya dejó caer que algunas personas del club no se habían portado excesivamente bien con él. En principio, Maric no será titular, pero disfrutará de minutos después del descanso.