Pretemporada de urgencia

Palabra de Del Nido: "Cesamos a Jiménez porque el equipo había entrado en barrena". Sin comentarios. Las peligrosas sensaciones que ofreció en los últimos encuentros radicalizaron los nervios. "Los futbolistas están muertos. ¿Qué ha pasado? Se han caído", son algunas de las frases que se oyeron en los despachos de Nervión días antes de ponerle fecha de caducidad al entrenador. Antonio Álvarez trabaja desde hace unos días con la predisposición de toda la plantilla, pero con el lastre de un alarmante problema físico. En Villarreal quedó en evidencia el estado.

Por este motivo, los técnicos han diseñado una pretemporada de urgencia para recuperar el potencial físico perdido. El equipo aprovechará los próximos 15 días, en los que no habrá compromisos entre semana, para formatear un trabajo especial con la idea de recuperar la fuerza y la velocidad. "Claro que queda tiempo para mejorar el estado de la plantilla", señaló el preparador físico, Ramón Orellana, después de una intensa sesión en la que se sometió a los futbolistas a superar exigentes circuitos de fuerza y cambios de ritmo. "Para ganar la guerra a veces se sacrifican batallas. Hay que asumir riesgos que te pueden costar batallas", dijo Orellana. El plan está diseñado. Los jugadores llegarán al encuentro del sábado con el Tenerife muy cargados tras los últimos entrenamientos. Los técnicos son conscientes del riesgo, pero entienden que el equipo recibirá los beneficios en un par de semanas.

Para Orellana, el calendario, las lesiones y la imposibilidad de rotar incidieron negativamente en el plano físico del grupo. La pretemporada de urgencia se ha activado.

El problema de Romaric

Orellana reconoció que Romaric necesita un tratamiento especial: "Es disciplinado, pero tiene problemas de peso. Cada metabolismo es diferente. Hay gente con tendencia a coger más peso y siempre tienen que estar con mucha autodisciplina. Nosotros estamos pendiente de eso y el jugador también".