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Liga BBVA | Mallorca

La llave para jugar en Europa está en Son Moix

Valencia, Osasuna, Málaga, Madrid y Espanyol, los rivales.

La llave para jugar en Europa está en Son Moix

Las nueve jornadas que quedan por disputar van a decidir un campeonato entero. Está en juego el título, las plazas europeas y también las de descenso. A estas alturas del campeonato nada está decidido y el Mallorca forma parte del grupo de equipos que quieren jugar competición europea la próxima temporada.

Sevilla, Athletic y Deportivo, por un lado, y Villarreal, Getafe y Atlético de Madrid son los rivales de un Mallorca que mantiene su puesto de Champions. Repasando el calendario que les queda a los de Manzano, en el entorno mallorquinista se cree que Europa pasa por el Ono Estadi.

El equipo balear se ha mostrado muy solvente de local como lo confirman sus 12 victorias en 14 partidos con un balance goleador brillante de 33 goles a favor por sólo 8 en contra.

Al Mallorca le queda por recibir en casa al Valencia, Osasuna, Málaga, Real Madrid y Espanyol. Las salidas ante Almería, ésta la más inmediata, Zaragoza, Athletic y Deportivo llevan implícitas dificultades añadidas: los dos últimos también se juegan su futuro continental mientras, que el Zaragoza está en plena lucha por la permanencia, por lo que la salida quizá menos comprometida parece ser la de Almería.

El concurso de acreedores, principal adversario

Quedan 27 puntos en juego y en el Mallorca se piensa que posiblemente con 64 puntos el acceso a Europa sea una realidad. Para ello sería necesario que el equipo mallorquinista sumara de esos 27 un total de 17, cantidad para la que se necesitan cinco victorias y dos empates, tarea complicada en nueve partidos. Los encuentros más problemáticos serán ante el Real Madrid en casa y frente al Athletic y Deportivo, fuera. En cualquier caso, el principal rival de los de Manzano puede ser el concurso de acreedores en el que puede verse inmersa la entidad a tenor de la situación económica por la que atraviesa. En este sentido, el club teme que la licencia UEFA, que tendrá que ser solicitada con la antelación necesaria, pueda ser rechazada por el máximo organismo futbolístico si el club se ve abocado a la Ley Concursal, un aspecto que no aparece expresado con claridad en el artículo 33 del Reglamento General de la licencia UEFA reflejado en el capítulo tres del mismo.