Ediciones
Resultados
Síguenos en
Hola

Liga BBVA | Athletic 4 - Racing 3

El Athletic presenta su candidatura a todo

La victoria de los leones sobre el Racing consolida a los bilbaínos en la sexta posición de la clasificación y les coloca a tan sólo dos puntos de la zona de Liga de Campeones. Llorente abrió el marcador en los primeros minutos del choque y sirvió en bandeja el segundo a Toquero. Tchité acortó distancias en los instantes finales de la primera mitad. Tras el descanso, Llorente logró su segundo gol de la noche tras un penalti cometido sobre él mismo. Bolado consiguió recortar la ventaja local a falta de diez minutos para la conclusión y llenó San Mamés de unos nervios que se encargó de borrar de un plumazo Susaeta con el cuarto tanto local. Bolado hizo el último gol coincidiendo con el pitido final.

ABEL ROMERA
<b>GENIO Y FIGURA.</b> Fernando Llorente fue la estrella del Athletic en su victoria ante el Racing en San Mamés.
GENIO Y FIGURA. Fernando Llorente fue la estrella del Athletic en su victoria ante el Racing en San Mamés.Juan Flor

El Athletic de Bilbao venció, no sin dificultades, al Racing de Santander en San Mamés en medio de un festival de goles. Fernando Llorente fue el mejor hombre del partido al lograr el primer tanto, servir en bandeja el segundo a Toquero y marcar el tercero tras un penalti que cometieron sobre él mismo. Susaeta logró el cuarto tanto local. Por parte del Racing marcaron Tchité e Iván Bolado, por partida doble. El equipo cántabro ofreció una imagen más que digna y no perdió la cara al encuentro en ningún momento. En el tramo final del partido los de Portugal se quedaron con un hombre menos por expulsión de Oriol por doble cartulina amarilla.

Los veinte puntos que sumaba el Racing como equipo visitante a su llegada a Bilbao lo convertía en un rival muy a tener en cuenta en San Mamés. El Athletic no anda nada fino fuera de casa y no se podía permitir fallar en La Catedral (donde no pierden desde el 6 de diciembre) para afianzarse en puestos de Europa League y seguir soñando con acceder a la Liga de Campeones, una ilusión que todavía sigue viva en Ibaigane. Al equipo de Portugal no le gusta tener la pelota y sus intenciones eran claras, ceder la posesión al rival, ser fuertes en defensa y jugársela al contragolpe. Amorebieta volvía en los locales tras perderse el partido ante el Atlético por acumulación de cinco amarillas. Yeste se perdió la cita por sanción y Torrejón y Toño fueron baja por problemas físicos.

Todo comenzó como estaba previsto, el Athletic se hizo con el dominio de la pelota tras unos primeros minutos en los que ambos equipos se mostraron valientes en busca del primer tanto del partido con un juego muy dividido. A medida que transcurrían los minutos, el Racing fue aminorando la velocidad en sus jugadas y el equipo local lo aprovechó para dejar clara la importancia de los tres puntos en juego. Fue el equipo bilbaíno el que gozó de la primera ocasión clara del encuentro tras una falta lanzada por Susaeta desde la frontal del área y se perdió junto al palo derecho de Coltorti tras desviar Toquero. El viento y la lluvia que comenzó a caer con el pitido inicial fue aumentando conforme avanzaba el encuentro, lo que complicó algunas acciones de los futbolistas.

A falta de dos minutos para alcanzar el cuarto de hora, Fernando Llorente logró el primer gol del partido, un gol marca de la casa. Tras un saque de esquina desde la banda izquierda de Gabilondo el 'rey león' entró desde atrás como una exalación para fusilar de cabeza a Coltorti. El Racing no tuvo tiempo para reaccionar tras recibir el primer tanto del encuentro. Tan sólo cinco minutos después volvió a aparecer el nueve del Athletic para servir en bandeja el segundo tanto del partido a Toquero tras una fabulosa jugada que se marcó el internacional sobre la línea de fondo y con la que dejó sin opción alguna a toda la zaga cántabra. Con San Mamés rugiendo a tope. Llorente estuvo cerca de poner La Catedral boca abajo con un remate de tacón que se encontró Coltorti cuando ya se cantaba el tercero en la grada.

Los hombres de Portugal sufrieron durante toda la primera mitad, sus posesiones cada vez eran más cortas y sus ocasiones de gol brillaban por su ausencia. El dominio era absoluto para los de Caparrós, que daban sensación de peligro cada vez que llegaba a la línea de tres cuartos. Tan sólo una vez en la primera mitad tuvo que emplearse Gorka Iraizoz ante una ofensiva rival, fue en un centro chut de Tchité que quedó en nada tras despejar el meta navarro. El conjunto local se gustaba teniendo todo a su favor: el marcador, la rapidez del mojado terreno de juego y la inocencia atacante de su rival. Fue entonces cuando el Athletic decidió levantar el pie del acelerador para tomarse un respiro y reservar fuerzas para el segundo acto. Un codazo propinado por Pinillos a Gabilondo dejó al cuadro rojiblanco con un hombre menos durante varios minutos en los que el centrocampista recibió puntos de sutura en la banda.

El Athletic acabó pagando los minutos de relax que se tomó en el tramo final de la primera mitad. A falta de cuatro minutos para el descanso, Tchité acortaba distancias a pase de Colsa, que se encontraba en posible fuera de juego en el momento de recibir la asistencia. Acto seguido, una buena jugada individual de Canales, que finalmente quedó en nada, pudo significar el empate visitante. Fuera como fuese, el conjunto local se marchó a los vestuarios con una ventaja muy corta a tenor de los méritos mostrados por uno y otro equipo en el primer acto.

Tras el descanso, fue el Racing el que se hizo con el control del partido desde el primer instante. Los locales entregaron la posesión en los primeros minutos a los cántabros, que se acercaron a las inmediaciones del área rival con oportunidad incluída, pero Iraizoz acertó a despejar el disparo de falta de Canales. Tras unos primeros minutos de agobio, el Athletic logró sacudirse la presión de su rival y logró que se equilibraran las fuerzas sobre el terreno de juego. A los diez minutos de la reanudación, Caparrós decidió dar entrada a Gurpegui en sustitución de Iturraspe con el objetivo de refrescar la medular de su equipo. Portugal hizo lo propio en su equipo y retiró a Serrano para dar entrada a Diop.

El Athletic comenzó a asediar la portería de Coltorti a falta de media hora para la conclusión con el objetivo de lograr el gol de la sentencia definitiva, mientras tanto el Racing no perdía el tiempo e intentaba fabricar sus acciones de ataque que, en ocasiones, llegaba a finalizar con peligro. El gol podía caer para cualquiera de los dos lados. Los locales protagonizaron dos llegadas al área racinguista con peligro, pero los remates de San José y Toquero corrieron la misma mala suerte y se perdieron por la línea de fondo. Los hombres de Caparrós no querían sorpresas de última hora y seguían buscando el tercer tanto mientras que el banquillo visitante seguía moviéndose, Arana sustituyó a Munitis.

A falta de quince minutos para el final, Fernando Llorente lograba su segundo gol de la noche tras transformar un penalti que cometió sobre él mismo el racinguista Christian. El gol que parecía el de la sentencia quedó sin efecto tres minutos después con un golazo de chilena de Bolado. Un minuto después del segundo gol visitante, Oriol fue expulsado por doble amarilla, la primera por empujar a Gurpegui y la segunda por un codazo sobre Fernando Llorente. Aún con un hombre más sobre el terreno de juego la tensión y los nervios sobrevolaban por San Mamés. Esos nervios los borró de un plumazo Susaeta a falta de dos minutos para el noventa de partido con el cuarto gol de los leones. Segundos antes del pitido final, Bolado logró su segundo tanto de la noche cerrando el marcador.

Con la victoria, el Athletic suma tres puntos de vital importancia para asentarse en zona europea. Los de Caparrós siguen sextos en la tabla, pero aumenta distancias con el resto de aspirante a la Europa League. Además, el equipo bilbaíno empata a puntos con el Sevilla y se coloca a sólo dos puntos del Mallorca, que ocupa plaza de Liga de Campeones. El Racing se mantiene a seis puntos de la zona de descenso tras su derrota en San Mamés.