"Remontaremos el vuelo cual Ave Fénix"

Superadas las horas más duras de desolación, preocupa la situación actual del equipo. Los máximos responsables han iniciado una operación para reactivar la moral y la confianza, porque lo que más inquieta a los dirigentes es que el grupo entre en un colapso mental.

La cita ante el Espanyol llega cargada de tensión. El ambiente que reina en el sevillismo parece que no sorportaría un tropiezo en Barcelona. Los nervios se han desatado y sólo las victorias calmarán la desilusión europea. Así, Monchi asumió el papel de acudir a la Ciudad Deportiva para charlar con el entrenador y con los jugadores. El director deportivo les hizo ver la necesidad de olvidarse del tropiezo con urgencia y centrarse en la prueba de fuego de mañana. El propio Jiménez, antes del entrenamiento, reunió a toda la plantilla para comenzar la nueva aventura. "Estoy dolido, pero debemos levantarnos para guiar esta nave con ánimo en las dos competiciones ilusionantes que nos quedan", dijo después el técnico en los medios oficiales. Ese es el mensaje que le ha transmitido Monchi, quien le hizo ver a Jiménez la obligación que tiene de asumir con fuerza la responsabilidad de levantar al equipo.

Poco a poco, la tensión de las horas posteriores al encuentro disminuye. El técnico entiende que es el momento de lanzar declaraciones de intenciones positivas: "No es aceptable que perdiera los papeles después del encuentro. Por eso, pido disculpas. Ha sido una desilusión muy grande de la que quiero resarcirme para compensar a la afición".

Del Nido trabaja en la sombra la recuperación del espíritu. El presidente, consciente del momento, no ha tardado en lanzar su grito de guerra: "¿Vas a dejar de luchar? ¿Vas a dejar de pelear teniendo la posibilidad de quedar tercero y ganar la Copa? Nos vamos a levantar y remontar el vuelo cual Ave Fénix". Mañana arranca un nuevo reto.