Cerro sigue con paso perfecto en la Copa y deja hundido al Emelec

El uruguayo Cerro logró hoy en la ciudad ecuatoriana de Guayaquil su segunda victoria en igual número de salidas tras superar 2-1 al Emelec, equipo que no suma puntos después de disputadas dos jornadas del Grupo 5 de la Copa Libertadores.

Cerro, que a falta del partido entre el Internacional y el Deportivo Quito lidera el grupo con seis puntos, tuvo dos propuestas, pues en el comienzo del partido se metió en su propia zona, desesperó al rival y tuvo poca salida en procura del arco de Emelec, pero en el segundo tiempo salió a buscar un triunfo que consiguió merced a la precisión en la definición.

Por su parte, el conjunto local, que de momento es último de su grupo sin puntos, careció de velocidad, sorpresa y facilitó el trabajo de los defensas centrales uruguayos al intentar llegar al área rival lanzando centros desde los laterales.

El dominio constante de Emelec terminó diluyéndose en la telaraña defensiva cerrista. Cada centro enviado al área uruguaya rebotó en la fortaleza construida por el visitante que, en ocasiones, se defendió hasta con diez elementos, dejando solo a Rodrigo Mora o Álvaro Mello para buscar un contraataque.

El final del primer tiempo evidenció a un Emelec totalmente lanzado al ataque, pero sin poder concretar en goles el dominio futbolístico al que sometió a su rival. Cerro sorprendió con el cambio de propuesta para el segundo tiempo, pues cambió su planteamiento ultra defensivo y salió en busca del gol, el cual logró con una acción acrobática de Caballero, quien tomó un rebote del travesaño e impactó el balón contra el suelo que se elevó y se filtró por en el ángulo superior derecho.

Emelec no pudo reaccionar, algo de lo cual tomó provecho el Cerro para aumentar el marcador con un violento remate de tiro libre del centrocampista Claudio Dadomo. Poco minutos después Pérez, de cabeza, logró el descuento de Emelec tras un tiro de esquina desde el sector izquierdo de la defensa uruguaya.

De ahí en adelante, el local buscó la igualdad, pero el Cerro se refugió bien y tuvo en el portero Mathías Rolero una verdadera aprenda de garantía.