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Liga Adelante | Las Palmas 1 - Córdoba 0

Guerrero salva a Kresic y el Córdoba sigue en el lío

El gol del madrileño sentencia un partido de necesitados

Ignacio S. Acedo
<b>JUSTIFICADA ALEGRÍA. </b>Javi Guerrero recibe las felicitaciones de Saúl y Beranger instantes después de marcar su gol, el que valió el triunfo.
JUSTIFICADA ALEGRÍA. Javi Guerrero recibe las felicitaciones de Saúl y Beranger instantes después de marcar su gol, el que valió el triunfo.carlos díaz-recio

La diferencia estuvo en el punto de mira: con 0-0 y la Unión Deportiva en pleno tembleque, Pepe Díaz recogió un regalo de Pignol, encaró a Pindado y mandó la pelota fuera de manera increíble. Diez minutos después, Guerrero estuvo en el sitio adecuado y en el momento justo. Sí, como Pepe Díaz. Pero con un matiz mayúsculo: remató entre los tres palos y se apuntó un gol decisivo. Mientras Las Palmas exprimió al máximo el acierto de su delantero referencia, el Córdoba purgó la pifia de su definidor, que pudo cambiar el encuentro y mandó a la basura la oportunidad de la tarde. Porque, en el reparto general de méritos, puede que el empate se ajustara más a lo ofrecido por unos y otros. Claro que a la Unión Deportiva, que llegaba a la jornada con una recesión de cuidado, eso le trae sin cuidado. Necesitaba ganar por una cuestión vital y lo hizo salvando la oposición anémica de un Córdoba que no dio un paso al frente para demandar más. Se quedó en acciones aisladas, en la búsqueda reiterativa de segundas jugadas, lejos de aprovechar con ortodoxia sus minutos de control, que los tuvo multiplicados tras el descanso.

Poco hay que contar antes del intermedio. Acaso las apariciones burbujeantes de Álvaro Cejudo, sienes rapadas y botas relucientes, a quien medirse al equipo de su tierra le disparó la pulsaciones. Un intento suyo desde lejos y otro de Rondón integraron el testamento local, en el que abundaron las ganas por encima del arte. En la gente de Lucas Alcaraz, menos filo aunque más punzante: un testarazo imponente de Juanjo encontró la soberbia respuesta de Pindado, que atajó el balón con fundadas sospechas de que lo hiciera dentro de la portería. Ahí sí que pueden justificarse las protestas visitantes aún sin existir un cotejo claro del desenlace.

Acabó el paréntesis y también desaparecieron los bostezos. Primero por el error de Pepe Díaz. Luego por el gol de Guerrero. Y hasta el final, por la incertidumbre de un 1-0 que fue siempre de gelatina. Respira Kresic, hasta ayer sin margen de error y ahora aliviado hasta las trancas. Lucas Alcaraz, en tanto, tendrá que seguir remando. Como esperaba.

Sergio Kresic "Con la victoria todo parece distinto"

Con la victoria todo parece distinto, aunque no podemos estar contento con la situación del equipo, pese a que hemos recortado diferencias con los de arriba. En los últimos diez o doce minutos, el Córdoba se fue arriba, con juego directo y nos ha creado problemas. Hicimos una buena primera mitad, aunque el gol no llegó hasta después del descanso. ¿Jorge? Yo siempre animo a todos los que tienen la camiseta amarilla. Tenía una idea del equipo para estar arriba, pero la mayoría de los refuerzos más importantes no han podido estar por sus lesiones".

Lucas Alcaraz "No merecimos perder el choque"

Creo que no merecimos perder. Perdimos puntos pero, por sacar algo positivo, recuperamos las sensaciones que el equipo necesitaba fuera de casa. Tuvimos ocasiones para adelantarnos y el rival, con muy poco, nos hizo daño. Hemos sido una paradoja porque, en la primera parte, hicimos un gol sin llegar y en la segunda, llegando no lo conseguimos. En Segunda la diferencia la marcan los goles. ¿Otro gol a balón parado? No nos meten tantos pero sí fue evitable. Me quedo con lo que nos servirá para hacer camino: la intensidad y la implicación de los jugadores".