La prensa turca considera un atraco el arbitraje del Galatasaray-Atlético

La prensa turca consideró hoy un "atraco" el arbitraje del italiano Gianluca Rocchi en el partido que ayer ganó el Atlético de Madrid por 1-2 al Galatasaray, consiguiendo el pase para los octavos de final de la Liga Europa de la UEFA.

Los diarios turcos se refieren a una jugada en el minuto 80 de partido -cuando el marcador aún lucía el 1-1 y la eliminatoria estaba empatada-, en la que el defensa colchonero Perea perdió un balón ante Caner Erkin en su propia área y, desde el suelo, intentó bloquearlo con la mano.

Todo el equipo turco montó en cólera, exigiendo el penalti, y Caner Erkin fue amonestado por las quejas ante el árbitro. Fue expulsado un minuto después al sumar una nueva tarjeta amarilla por una fea entrada.

"¡Manos arriba!" (Milliyet), "Árbitro ladrón" (FotoMaç) fueron algunos de los titulares en las páginas deportivas de los diarios turcos.

Otros diarios, como HaberTürk o Fanatik, hicieron hincapié, siguiendo las quejas del entrenador del Galatasaray, Frank Rijkaard, en que tampoco sirvió de nada el árbitro asistente en la línea de fondo, que observó el presunto penalti a apenas dos metros de la jugada.

Los columnistas deportivos tampoco dejaron de lado el trabajo del árbitro y lo señalaron como culpable de la derrota: "Italiano ciego", "Made in Italy", "Producto italiano", titularon en referencia a la nacionalidad del colegiado.

Sin embargo, el entrenador del Atlético de Madrid, Quique Sánchez Flores, también reclamó penalti en una jugada anterior a la polémica, por una zancadilla a Reyes.