VALENCIA 3-BRUJAS 0
El Valencia necesita la prórroga para imponerse con holgura al Brujas
El equipo de Unai sufre en exceso para meterse en los octavos. Mata marcó en el primer minuto, pero la sentencia no llegó hasta el minuto 97. Espera el Werder.
El Valencia necesitó llegar a la prórroga para poder imponerse por 3-0 y con holgura al Brujas belga y pasar a los octavos de final de la Liga Europa en un partido donde, a pesar de adelantarse a los diecinueve segundos de juego, sufrió mucho para transformar su dominio en goles.
El equipo desperdició un gran número de ocasiones de gol antes de llegar a la prórroga, cuando Pablo Hernández se encargó de cerrar la clasificación con dos tantos que hicieron justicia a la superioridad del Valencia en el conjunto de la eliminatoria.
Unai Emery, técnico del Valencia, optó finalmente por devolver la titularidad a César Sánchez en la portería, en detrimento de Miguel Ángel Moyà, pero sorprendió con una variación táctica al colocar a tres centrales y jugar con Miguel y Pablo como carrileros para conectar con Villa, Zigic y Mata en la delantera.
Los jugadores del equipo valenciano arrancaron de la mejor forma posible con un tanto de Mata a los diecinueve segundos de juego, con el que el que igualaron el marcador del encuentro de la ida y los noventa minutos de sufrimiento e impotencia vividos en este.
Tan decidido salió el Valencia a dar la vuelta a la eliminatoria que en los primeros diez minutos ya había podido sentenciar su pase a octavos con diversas oportunidades de Mata, Pablo y Villa, que fueron desaprovechadas como le sucede al conjunto dirigido por Unai Emery durante los últimos partidos.
Mientras tanto, el Brujas, que en Mestalla evidenció las carencias futbolísticas que en su estadio había podido disimular a base de agresividad, estuvo a expensas del Valencia, que se encontró cómodo al contraataque gracias a la acumulación de jugadores en la zona de ataque y las subidas de los carrileros.
Sin embargo, cuando se acercaba el final del primer tiempo, los valencianos cedieron en intensidad, lo que el Brujas aprovechó para, con dos tiros de falta y una internada al área de Perisic, dejar constancia de que los hombres de Emery deberían mejorar en concentración si querían clasificarse.
El Valencia respondió en la reanudación con un retorno a su clásico sistema de juego de cuatro defensas, con lo que ganó en seguridad defensiva, con la inclusión de Alexis en el lateral izquierdo, y más velocidad por banda, con la salida de Joaquín al flanco derecho.
El conjunto valenciano continuó su constante búsqueda del segundo tanto con más ocasiones falladas mientras proseguía con su serie de imprecisiones frente a un Brujas, que, además de dar muestras de conformarse con llegar a la prórroga, tampoco demostró ser oportunista cuando pudo serlo.
El portero Stijnen se erigió como el héroe del Brujas al mantener con vida al equipo de Flandes en una doble intervención donde desbarató una oportunidad fabricada por Mata y Pablo que acrecentaba el nerviosismo en Mestalla.
Con el factor tiempo en contra del Valencia y con el Brujas cada vez más encerrado en su área, no le faltó a César tiempo para lucirse en un mano a mano y en una estirada magistral con la que salvó a sus compañeros de despedirse del pase a octavos antes de tiempo.
No obstante, el conjunto entrenado por Emery no bajó su ritmo de insistencia en las jugadas combinadas, donde intentó llegar al área belga de todas las formas y por todos los sitios posibles sin poder evitar una prórroga que no se había merecido jugar por los méritos demostrados hasta el momento.
Al fin, el Valencia encontró el ansiado tanto que daba la vuelta a la eliminatoria en la primera parte de la prórroga, y fue gracias a un tiro cruzado de Pablo desde fuera del área, con el que rompió la agonía del equipo de Emery generada por tantas ocasiones de gol frustradas.
Aún así, incluso con el objetivo cumplido, el conjunto de Mestalla siguió sufriendo para asegurar su clasificación hasta que Pablo, de nuevo, regateó a Stijnen para anotar el tanto de la tranquilidad.